El tribunal que juzga en Santiago del Estero los crímenes de lesa humanidad cometidos en la llamada Megacausa III dio marcha atrás y revocó la prisión domiciliara que le había otorgado en la víspera al principal acusado, Antonio Musa Azar. La apelación de los organismos de derechos humanos forzó el cambio del voto de uno de los magistrados que había aceptado la solicitud del represor, Abel Fleming, quien junto con Domingo Batule le habían concedido el beneficio “al Etchecolatz de Santiago del Estero”, como lo definió el abogado Pedro Orieta, quien había calificado la decisión original del TOF, que tuvo la disidencia de Carlos Lascano, como “arbitraria”. 

“Para Santiago del Estero Musa Azar representa lo que Etchecolatz a la provincia de Buenos Aires”, agregó Orieta, quien apeló la decisión tomada a última hora del jueves, el único día a la semana de audiencias de un juicio que encabezan dos jueces salteños y uno de Córdoba.

Musa Azar, quien siguió ostentando poder como secretario de Seguridad provincial durante los sucesivos gobiernos de Carlos Juárez hasta 2003, acumula cuatro condenas a cadena perpetua, que deberá cumplir en una sala del Hospital Gumersindo Sayago que, de acuerdo con la revocatoria, “no genera riesgo de contagio por tratarse de sala aislada”.

El mismo tribunal que el jueves por la noche había aceptado el traslado del genocida a su casa, ayer ordenó que “el traslado de Musa Azar al domicilio  déjese sin efecto”.