Prácticas represivas sobre niños y jóvenes; sobre hombres, mujeres y adolescentes que colman las cárceles de todo el país; sobre mujeres, sobre pueblos originarios; sobre migrantes, sobre los que luchan por una vivienda, sobre los que luchan en general. Cada una de las variantes en las que el Estado desata su fuerza represiva será eje de una comisión de debate del segundo Encuentro Nacional de Derechos Humanos contra la Impunidad y la Represión que tendrá lugar este fin de semana en la Ciudad de Buenos Aires. “Se ven claros avances de avasallamiento de los derechos humanos y de la impunidad de parte de quienes atentan contra ellos”, apuntó Carlos Loza, referente de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos (AEDD), una de las organizaciones que convocan al encuentro que, ante tal coyuntura, persigue un objetivo: construir un movimiento de derechos humanos “amplio, amplísimo, que pueda responder de masivamente a cada derecho arrasado”. “La ofensiva generalizada sobre todos los derechos requiere reflexión y acción urgente, masiva y unificada”, postuló Loza.  

“Nos levantamos todas las mañanas y hay allanamientos, gente detenida por reclamar lo que le corresponde. O medidas planificadas para avasallar derechos adquiridos, como la reforma laboral o la previsional. Estamos ante una coyuntura que requiere reflexión y acción urgente, masiva y unificada”, consideró Loza. Ese, justamente, la conformación de un movimiento de derechos humanos amplio “que supere las diferencias partidarias” es el principal objetivo de este encuentro entre organismos de derechos humanos y agrupaciones sociales que, entre hoy y mañana, cumplirá su segunda edición. 

La sede del barrio porteño de Constitución de la facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires (Santiago del Estero 1029) será el escenario en donde, entre las 9 y 17 de cada día, se desarrollarán los debates, distribuidos en comisiones y abiertos a la participación de quien lo desee. “Los organismos convocantes afirmamos que el Estado es el responsable de garantizar el pleno ejercicio de los derechos, y el único responsable de las violaciones de todos y cada uno de ellos”, advirtieron. 

Los debates girarán en torno de políticas públicas represivas que recaen sobre la niñez y juventud; represión en lugares de encierro, ataques a pueblos originarios y temas relativos a cuestiones socio-ambientales; problemáticas represivas en torno de los reclamos por tierra y vivienda y represión a la protesta social. También habrá comisiones dedicadas a analizar el estado de los juicios por delitos de lesa humanidad; los vínculos entre el Estado y la corrupción; trata, género y derechos humanos; migración y medios de comunicación. 

La primera edición del Encuentro nacional de derechos humanos contra la impunidad y la represión tuvo lugar en 2014. “En estos últimos años la situación se agravó de manera generalizada”, mencionó el referente de la AEDD que organiza las jornadas junto a la Coordinadora contra la Represión policial e institucional (Correpi), el Equipo Argentino de Trabajo e Investigación Psicosocial, Colectivo Memoria Militante, Familiares y Amigos de Luciano Arruga, Hijos Oeste y Liberpueblo. Comenzaron a planificar la segunda vuelta a principios de año. No imaginaban siquiera la desaparición forzada de Santiago Maldonado, que sucedió en agosto en el marco de un operativo represivo de Gendarmería y cuyo cuerpo apareció tres meses después en el Río Chubut. Ni el cada vez más difícil panorama que envuelve al proceso de memoria, verdad y justicia: “Hay decididamente un plan de impunidad para los responsables de los delitos de la última dictadura esperando a la vuelta de la esquina”, sostienen desde la AEDD.     

Los organismos definieron este segundo encuentro como una “herramienta para articular colectivamente respuestas” ante las situaciones de abusos y violaciones a los derechos humanos.