Por Tomás Lukin

Corporación América seguirá explotando a través de su empresa Aeropuertos Argentina 2000 las principales terminales aéreas del país hasta 2028. La continuidad del holding que encabeza el empresario Eduardo Eurnekian fue confirmada por el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich. La definición del funcionario permite zanjar las tensiones entre el grupo y la Casa Rosada. 

El proceso de privatización concluido a comienzos de 1998 habilitaba al Poder Ejecutivo a rescindir el vínculo diez años antes de la finalización del contrato. El Gobierno amenazó con revisar las concesiones del sistema aeroportuario e incluso comenzó a sondear en el exterior posibles interesados en su explotación. “La opción del gobierno de utilizar una cláusula que permita una finalización temprana de la concesión en 2018 no está más en la mesa”, sostuvo ayer Dietrich en declaraciones a la agencia de noticias Bloomberg. 

La Corte Suprema, por su parte, emitió el jueves pasado una sentencia contra el millonario empresario en una causa por evasión en la venta sus acciones en Cablevisión. La decisión del máximo tribunal no cuestionó el uso de fideicomisos en el exterior pero lo obliga pagar una serie de impuestos por la operación que habían sido eludidos. 

Eurnekian llegó a participar de la licitación para la privatización de los aeropuertos que dispuso por decreto el gobierno de Carlos Menem en 1997 de casualidad. El empresario de origen armenio había perdido con el Grupo Socma en la puja por quedarse con el Correo Argentino y su empresa ni siquiera se presentó a la licitación por las terminales aéreas. La oportunidad llegó cuando los Pérez Companc se bajaron del consorcio que compartían con la estadounidense Ogden y la italiana SEA. Necesitados de un socio local los empresarios aceptaron la sugerencia del Ministerio de Defensa e incorporaron a Eurnekian que así se embarcó en la operación que convertiría a la Corporación América, con 53 terminales en siete países, en uno de los principales operadores de aeropuertos del mundo (entre los contendientes que quedaron fuera figuraba un holding donde la pata nacional la ofrecía el grupo de la familia Macri). Aquel primer negocio de aeropuertos abierto en 1998 también sumergió a Eurnekian en una escandalosa disputa de poder, a la que sobrevivió, en la que Mossack Fonseca cumplió un rol estelar. El libro Argenpapers de los periodistas Tomás Lukin y Santiago O’Donnell revela que por lo menos ocho sociedades montadas entre 1996 y 2003 estuvieron involucradas en el entramado offshore utilizado para ese emprendimiento.

La disputa entre el Gobierno y Corporación América comenzó el año pasado. Diferencias personales y corporativas llevaron a la escalada que amenazó con desplazar del negocio a Eurnekian. Desde Transporte sostenían públicamente que las operaciones de Aeropuertos Argentina 2000 en Argentina no tenían “ni la calidad ni la eficiencia” que se observaba en otros aeropuertos que eran operados por la empresa en distintos puntos del mundo. En marzo la Resolución 95-E/2017 de Transporte habilitó la realización de los estudios necesarios para la revisión de los contratos de concesión. Las tensiones comenzaron a desarticularse al mes siguiente cuando Eurnekian nombró a su sobrino Martín Eurnekian al frente de AA2000 que reemplazó en el cargo a Rafael Bielsa. “Las diferencias se remediaron luego de la promesa de Eduardo Eurnekian de cambios estructurales que coinciden con nuestra visión, que es la de priorizar al cliente”, sostuvo ayer Dietrich en declaraciones a la agencia de noticias Bloomberg.