Para el director James Gunn, uno de los mayores desafíos al reimaginar al superhéroe más famoso del mundo fue decidir si incluir los emblemáticos calzoncillos rojos en el traje. En una entrevista reciente, Gunn explicó las consideraciones detrás de esta elección, revelando cómo el protagonista, David Corenswet, tuvo un papel crucial en la decisión final.

Un regreso bien meditado

En sus declaraciones, James Gunn, responsable del nuevo universo cinematográfico de DC, compartió que desde el principio tuvo serias dudas sobre los calzoncillos rojos. "No quería que el traje pareciera una camiseta mojada", comentó Gunn, destacando su colaboración con la diseñadora Judianna Makovsky, con quien trabajó antes en Guardianes de la Galaxia. Este dúo buscó encontrar un equilibrio entre el respeto a los orígenes del personaje y la necesidad de adaptarlo a los tiempos actuales.

Zack Snyder, quien dirigió la interpretación de Henry Cavill como Superman sin los calzoncillos, reveló a Gunn que había probado innumerables diseños de traje para llegar a esa decisión. "Intenté mil versiones, pero ninguna funcionó para mí", confesó Snyder. A pesar de sus dudas iniciales, Gunn mantuvo una mente abierta y optó por hacer pruebas con ambos diseños. Una característica distintiva de este Superman en el DCU será precisamente ese toque retro que aportan los calzoncillos.

La influencia de Corenswet

El actor David Corenswet aportó una perspectiva única que resultó decisiva para Gunn. En una conversación, Corenswet señaló que aunque los calzoncillos podían parecer ridículos, quizás ahí residía su verdadero valor: subvertir la imagen ostentosa del héroe y hacerlo más accesible. "Los calzoncillos están ahí para, de alguna manera, mostrar que detrás de esos poderes inimaginables hay alguien con quien podemos identificarnos", sostuvo el actor.

Gunn encontró en las palabras de Corenswet la inspiración necesaria para apostar por un Superman más humano. "Queremos que el público vea a este ser extraordinario como un amigo, no como una amenaza", resaltó. Al supervisar el diseño final del traje, era fundamental que el mundo que rodease a Superman fuera uno donde los metahumanos pudieran existir sin perder su conexión con la humanidad.

El enfoque en lo emocional

Esta decisión no fue solo un elemento estilístico, sino que también buscó reflejar un pilar emocional de la película: la relación de Superman con la humanidad. Las características clásicas del superhéroe no provienen solo de sus habilidades sobrehumanas, sino de su cercanía con las personas. Muchas versiones del traje de Superman han omitido los calzoncillos para modernizar su figura, pero Gunn y Corenswet eligieron recuperarlos conscientemente por lo que representan.

La elección del traje no fue un capricho artístico. Detrás de cada detalle está la intención de representar a un hombre de otro mundo que ama a quienes lo rodean. "Es un tipo que podría resultar intimidante, pero con esos calzoncillos queremos que inspire esperanza y seguridad", destacó Gunn, reflexionando sobre la importancia de estos pequeños símbolos culturales en la construcción de un personaje que es sinónimo de grandeza y humildad a la vez.