Durante el historial del Súper TC2000, incluido el viejo TC2000, sin dudas que Renault es una de las marcas emblemáticas en la categoría. Primero con los recordados R.18, luego la exitosa Fuego, la aparición del 19, el Mégane y ahora el Fluence, la automotriz francesa tiene una gran identidad con el automovilismo deportivo en la Argentina. De hecho, las “inferiores” del automovilismo nacional, es la Fórmula Renault, un clásico para los jóvenes pilotos que sueñan con llegar a la vidriera grande de la escena del deporte motor. Sin embargo, pese a la gran actividad de Renault Sport en la Argentina, los objetivos fueron esquivos en la última etapa hasta que llegó la consagración de la mano de Facundo Ardusso. Y más si se contrasta con la era dominante del rombo, entre fines de la década de los años 80 y principios de los 90.

En aquella época, Renault fue imbatible y no sólo marcó una era en aquél TC 2000. También lo hizo en el automovilismo nacional. La marca francesa unió a los más grandes con un objetivo en común: llevar a la moderna y revolucionaria cupé Fuego al éxito total de la mano de Juan María Traverso, bajo la ingeniería del prestigioso Oreste Berta.

No tuvieron oposición. La Fuego se coronó campeón entre 1986 y 1994. En el medio, dos curiosidades: en 1987 se coronó Silvio Oltra, con un equipo privado comandado por el Benavídez Competición, y en 1989, con Miguel Ángel Guerra, compañero de equipo de Traverso y actual director deportivo de la estructura del rombo.

Traverso se llevó 6 títulos con la Fuego y Berta. Incluidas victorias emblemáticas, como la que logró en General Roca 1988 con el auto prendido fuego. Tal era la trascendencia de la Fuego en el TC2000, que en su momento la empresa de pantalones Lee pidió pintar de negro al auto porque la moda imponía los pantalones oscuros. Y esa exposición en los autódromos obligó a Renault a vender Fuego de color negra, ya que el público quería tener “el auto del Flaco Traverso”.

En 1993 llegó la última temporada del vínculo más exitoso, entre Traverso y Berta. Si bien lograron cinco victorias (Rafaela, General Roca, Río Cuarto, Nueve de Julio y Rosario), los chispazos entre ambos protagonistas se encendieron cada vez más. En la segunda carrera en Rafaela, Traverso recibió la orden de equipo de darle la victoria a Luis Belloso. Allí el Flaco no asistió al podio ni a la conferencia. Pese a la coronación, Traverso se alejó del equipo.

Los tiempos cambiaron. Ayer Renault lo celebró como nunca. De hecho, Alejandro Reggi, director comercial de Renault Argentina, festejó con el campeón en lo alto: “Es la primera vez que me subo a un podio, después de tantos años. Finalmente logramos el gran objetivo, después de tantos subcampeonatos. Todas las pelotas pegaban en los palos. Esta vez la metimos. Hicimos historia”. A su lado estaba Luis Fernando Peláez Gamboa, presidente de Renault Argentina, que con su presencia marca la importancia que tiene para la automotriz la corona del Súper TC2000.