El director técnico de Independiente, Daniel Holan, último campeón de la Copa Sudamericana, presentó su renuncia “indeclinable” a las autoridades del club por las amenazas de muerte que sufre él y sus familiares, desde que fue secuestrado por Pablo “Bebote” Alvarez por negarse a pagar 50.000 dólares a la barra brava del Rojo para que pudiera viajar a Paraguay. En una carta a los hinchas, el técnico explicó que su decisión estuvo motivada  por “indeseables situaciones extra-deportivas que se interpusieron” en su trabajo.

“Por primera vez en mi vida, la integridad física de mi familia, de alguno de mis colaboradores y la mía propia estuvo en grave riesgo”, denunció Holan, al resaltar que todos los hechos ya están bajo proceso penal. “Es una situación que no estoy dispuesto a tolerar, ni a convivir y creo que ningún trabajador del fútbol debería aceptar”, agregó.

Ayer por la tarde, tras la confirmación de Hugo Moyano en la presidencia del club, el dirigente sindical se reunió con Holan en el local de la Federación de Camioneros en Constitución para intentar extender el vínculo. Holan le presentó a Moyano un plan para el manejo integral del fútbol de Independiente, que contempla una renovación de estructuras que llega hasta las divisiones inferiores. Aunque trascendió que el presidente aprobaría su requerimiento, Holan publicó hoy en twitter su renuncia.

“A pesar que el Presidente y la CD me han manifestado su apoyo incondicional para renovar mi contrato, tratando de brindarme todas las facilidades que están a su alcance, mi prioridad absoluta es mi familia y su tranquilidad. Eso no es negociable”, escribió. Puntualizó que le resulta “inconcebible” que el DT y su familia tengan que movilizarse "con custodia policial por todos lados, día y noche”. “Mi amor por Independiente, que ustedes conocen es genuino y dejar este puesto que tanto soñé durante más de 30 años es la decisión más difícil de la vida. Pero debo hacerlo por el bien de todos”, destacó. Por último pidió que los hinchas sigan apoyando a los jugadores porque “son unos gladiadores”.