El paso de Ariel Holan por Independiente quedará marcado por la obtención de la Copa Sudamericana, tras lo cual decidió no continuar su carrera en el club de Avellaneda, y por el apriete que sufrió el pasado 19 de octubre, cuando el líder de la barra brava del Rojo, Pablo “Bebote” Alvarez, tras una práctica previa al viaje del equipo a Paraguay para disputar una de las semifinales del torneo internacional.

Ese día, luego de subirse a su auto en compañía de su ayudante de campo Javier Telechea, el entrenador fue emboscado por el líder barrabrava y un grupo de secuaces que montaron un operativo, que incluyó automóviles y varias motos, para interceptar el auto del DT en el acceso Sudeste y obligarlo a desviarse.  

Tras esa acción con ribetes cinematográficos, Bebote Alvarez le exigió 50 mil dólares para costear el viaje de la barra a Paraguay a cambio del apoyo de los hinchas que le responden en las tribunas. La extorsión fue acompañada por amenazas para él y sus familiares. Y no era precisamente la primera vez que la barra intentaba apretar a Holan, quien ya se había negado a darles dinero en otras dos oportunidades.

“La decisión es tuya”, fueron las palabras del líder barrabrava, acostumbrado a recibir dádivas de dirigentes y futbolistas del Rojo por varios años. Holan no sólo se negó a pagar sino que, atendiendo a la gravedad de los hechos y a la intervención de la Aprevide, que presentó el caso ante la fiscalía de Lomas de Zamora, dio otra muestra de valentía al presentarse a declarar sobre los hechos ante la Justicia. Antes de eso, el entrenador le había expresado su preocupación al presidente del club. El vice Carlos Montaña y el secretario general del club, Héctor Maldonado, acompañaron a Holan a declarar ante la fiscal Laura Carballal.

“Privación ilegítima de la libertad y extorsión”, son las causas que tendrá que afrontar Bebote Alvarez, preso tras el pedido de captura librado por el juez Luis Carzoglio.

“Se puede terminar con los barrabravas y que vayan presos”, expresó hace unos días el titular de la Aprevide, Juan Manuel Lugones. La Justicia atacó otra vez a los barras con una serie de operativos en los que fueron detenidos otros 21 barrabravas y el vicepresidente primero del club, Noray Nakis, acusado de sostener negocios ilícitos con los violentos. 

Holan decidió no seguir en el Rojo tras la obtención del campeonato internacional, debido a la situación que le tocó vivir. Es una verdadera pena que así sea. El fútbol argentino necesita más técnicos como él, con capacidad de sobra para convencer a los futbolistas y hacer jugar bien a sus equipos, y para dejar bien en claro que no son precisamente los barras los que ganan campeonatos, ni mucho menos.