El contador público y experto en mercado de capitales, Matias Battista, analizó este jueves por la 750 cómo impacta en las finanzas locales el escándalo de presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) que está sacudiendo al Gobierno de Javier Milei.
Según explicó, al poner en contexto, el Gobierno llegó a esta escándalo después de unas semanas donde ya venía “muy golpeado desde lo económico”, no solo por el movimiento del dólar, sino “por el disparate que están pagando de tasa de interés”.
En este sentido cuestionó la decisión del ministro Luis Caputo de decidieron desarmar las LEFI, algo que, según dijo, hizo que se dispararan astronómicamente las tasas de interés pagas a los bancos.
Las LEFI eran instrumentos emitidos por el Tesoro Nacional con el objetivo de absorber pesos que tenían en su poder los bancos a muy corto plazo, y así colaborar en el control de la liquidez.
Sin embargo, después de que el Gobierno decidiera no renovar ni emitir más LEFI, con la expectativa de que esos fondos se volcarán a las LECAP (Letras de Capitalización), los bancos optaron por otras inversiones de corto plazo, algo que aumentó la circulación de pesos y presionó al dólar.
En este contexto, las tasas empezaron a subir sin freno para lograr reabsorber parte de esos pesos vía una nueva licitación. Este punto, para Battista, “destruye toda la actividad económica”, ya que “la tasa de interés vuela en cuenta corriente, en negociación de cheques y en créditos”.
“A todo esto se le suma la brutal incertidumbre política que genera el escándalo de las coimas. Las crisis económicas desencadenan crisis políticas. El mercado se está preguntando hasta qué nivel va a escalar la crisis política”, afirmó.
Y añadió: “El gobierno abandonó los manuales liberatorios y les dieron tasas más altas y más cortas, porque encontró paz con el sistema financiero con una renovación del 100 por ciento. Pero lo hizo porque encontró el precio al cual deja tranquilo el mercado”.
“Eso es 75 por ciento de tasa. Entonces ellos están más tranquilos, porque si no, no le renovaban. Era un disparate si con esta tasa, que está por encima de la inflación por tres veces, encima subía el dólar”, finalizó.