Desde Brasil, el corresponsal de Página|12 Darío Pignotti dio detalles de la puja política que se detonó entre el Estado bolsonarista de Río de Janeiro y el gobierno federal de Inácio "Lula" da Silva luego del megaoperativo que reportó más de 60 muertos. 

"No estamos en un momento crítico de la violencia en Río, pero hay que decir que es una ciudad que vive un clima de conflagración permanente", señaló por un lado Pignotti, en diálogo con la 750

Según relató el periodista, el delito en la ciudad está partido en dos. Por un lado, el Comando Vermelho, es decir, el narcotráfico clásico, controla el norte de la metrópolis. Por el otro, con el control de la zona oeste de Río de Janeiro, en la zona de Jacarepaguá, están los carteles paramilitares. 

"Son todos carteles bolsonaristas que llegaron, inicialmente, para expulsar a los narcos tradicionales y lo hicieron, pero se afincaron y ahora son ellos los que trafican. Río vive una situación de violencia rutinaria", explicó Pignotti en Branca de Vuelta.

Días atrás, el gobernador fluminense, Flavio Bolsonaro, hijo del expresidente, había hecho una declaración en redes sociales sobre el tema: 

"¡Qué envidia! He oído que hay barcos como éste aquí en Río de Janeiro, en la bahía de Guanabara, inundando Brasil con droga. ¿No te gustaría pasar unos meses aquí ayudándonos a luchar contra estas organizaciones terroristas?", escribió de forma irónica el gobernador Bolsonaro, en respuesta al reciente ataque del Departamento de Guerra estadounidense a un supuesto buque vinculado al narcotráfico en el Pacífico. 

Por su parte, y luego del megaoperativo trágico de este martes, el gobierno federal emitió un comunicado en el que define como "particular" la metodología que implementaron las autoridades fluminenses y le recordó al bolsonarismo que es poco probable que le brinden autorización a las Fuerzas Armadas para actuar en el lugar. "El presidente del Partido de los Trabajadores (Edinho Silva) estuvo menos contenido en la respuesta y calificó a la operación como desastrosa", aclaró Pignotti. 

Por último, el periodista de Página/12 recordó que el megaoperativo fue la operación más violenta de la policía de Río de Janeiro desde el fin de la dictadura, en 1985. El gobierno federal convocó a una reunión de emergencia en el Palacio del Planalto.