Admirable es la tarea de Sofía Elizalde, dedicada en su amor por el cine a encontrar lo que parece perdido. Realizadora Audiovisual (EPCTV), Conservadora de Museos (Escuela Superior de Museología), ha participado también en la Film Preservation & Restoration School Latinoamérica 2017 (CINAIN, L'immagine Ritrovata, Cineteca di Bologna, FIAF). Su tarea remite a su geografía y ésta no es otra sino Rosario. Atención: es por su empecinamiento que una de las películas míticas de la filmografía regional (y nacional), ha sido parcialmente encontrada.

Se trata de Mujer, tú eres la belleza (1928), primera de las cuatro películas del pionero ítalo‑argentino Camilo Zaccaría Soprani (1893‑1974), destacado realizador y periodista local. La última de ellas, El Hombre Bestia o las aventuras del capitán Richard (1934), recuperada hace unos años, fue temática del transmedia dirigido por Fernando Irigaray: Tras los pasos del Hombre Bestia (2012).

Ahora bien, con Mujer, tú eres la belleza hay un dilema apenas esbozado en los libros de cine argentino: ¿erótica?, ¿pornográfica? Misterio. La decisión de Elizalde por encontrar la película fue acompañada por Marcelo Vieguer, coordinador del Centro de Documentación Multimedia de la EPCTV. Hasta el hallazgo que esta nota informa, del film de Soprani sólo sobrevivían unos pocos fotogramas. "Estos fotogramas los guardó Cristina Zaccaría, la hija, y hace un par de años llevó este material a Alfredo Scaglia, de Cine Club Rosario, para digitalizarlos. Allí me entero de esta historia. Los fotogramas estaban recortados y puestos en una especie de cuadernito, hecho por el propio Soprani", le comenta Sofía Elizalde a Rosario/12. "Cuando ella me cuenta del proyecto, de lo que está investigando, y que quiere hacer un documental sobre una película perdida, sinceramente nunca pensé que se pudiera llegar a encontrar algo. Es así cómo empezó a buscar por todo lugar donde pudiese haber algún tipo de archivo y material fílmico", agrega Vieguer.

El fragmento es visto por el cronista, ansioso. Son alrededor de diez minutos, de un largometraje que originalmente superaba los sesenta. Modelos femeninos, desnudos, escenarios rocosos (Córdoba, se supone), mujeres nadando, otras posando para el artista en su estudio, junto a intertítulos que informan y establecen un nexo con la historia del arte. Es notable cómo el film enmarca en un mismo encuadre al pintor y su modelo, casi como una legitimación artística del propio cine. Pero lo visto encierra mucho más.

 

Andres Macera
Sofía Elizalde y Marcelo Vieguer, expertos involucrados en el proyecto tras el hallazgo.

 

Elizalde: ‑Hay que tener en cuenta que cuando se estrenó, era una especie de película huérfana, porque se presentó como una producción francesa, Soprani no figuraba, y reconoció la autoría muchos años después. Algo similar pasó con Afrodita, de 1928, presentada como una producción francesa bajo la dirección de Pierre Marchal, cuando en realidad se trataba de Luis Moglia Barth. Lo que ocurre es que Mujer... se estrenó en marzo del '28 en Rosario, y Afrodita se estrena en octubre de ese año en Buenos Aires. Afrodita es censurada, sufrió la cruzada del diario católico El Pueblo, y Mujer... no tuvo problemas, ni en Rosario ni en Buenos Aires. La película pasa el comité de censura municipal de Rosario, está el documento que lo comprueba (cuya copia Elizalde exhibe). Por supuesto que no es apta para menores pero se indica que "no es inconveniente para señoras y señoritas". ╔se es el indicio de que no era una película pornográfica, además se estrenó en Teatro El Círculo y se siguió exhibiendo en otras salas.

Vieguer: ‑Es imposible saber si este metraje se corresponde con el montaje original, probablemente no. Lo que sí, y gracias a aquellos fotogramas guardados, se comprueba que son los mismos que los de la película.

Entre lo mucho y extraordinario que se relata, el film de Soprani contaba con la participación de modelos en vivo ‑¿cómo habrán sido esas proyecciones?, se pregunta Vieguer‑; incluso, al momento del estreno en Buenos Aires, el film se permitió el modelado de la actriz francesa que a su vez fuera la protagonista de Afrodita. "En las notas publicadas en la revista La película, de enero del '29, Mujer, tú eres la belleza aparece mencionada con mucho éxito de público", señala Elizalde.

El encuentro de la lata en cuestión tuvo lugar "en el archivo de Oscar Saini, un proyectorista que vivía en zona sur. Cuando llegué a su archivo él ya había fallecido, estaba su hijo; en ese momento el archivo estaba intacto, con latas del piso al techo, todo rotulado, con largometrajes enteros y latas sueltas. Fue ahí fue donde se produjo el hallazgo. Pero la había guardado con otro nombre, La mujer y el arte; fue un indicio para saber qué era. La copia encontrada tiene sonido incorporado, es de acetato y no de nitrato, el hecho de que tenga sonido indica que es una copia posterior".

En cuanto al destino del hallazgo "existe la posibilidad de llevarla a la Cineteca Nacional de México, en un proyecto colectivo que dirige Fernando Osorio Alarcón, conservador del patrimonio audiovisual mexicano, para que se pueda hacer el proceso de digitalización y restauración digital. La intención es que no pase como sucedió con El hombre bestia, de la que se hizo un transfer en vhs y se perdió el fílmico original, acá lo que importa es recuperar el fílmico, revertir el proceso de deterioro, acondicionarla, hacer una digitalización y con ese material digital, restaurarlo. Estaría bueno poder conseguir alguna ayuda económica para que se pueda hacer otra copia en fílmico, eso se puede hacer en la Universidad Nacional Autónoma de México, en su filmoteca, pero para eso es necesario el dinero, es costoso", concluye Elizalde.