Las luces de tik tok me cegaban. El quia fachón tenía un aire a James Dean pero roñoso y sin afeitar, los brazos tatuados y la infaltable gorrita con la visera para atrás.
Cuando estaba internada en la clínica, luego de un ACV, mis intestinos no actuaban. Carecían de movimientos peristálticos, de gases expelidos con soltura. No sé cómo decirlo de otra manera.
¿Qué le vieron a la serie Adolescencia para que volviera a circular por las redes un psicoanálisis como el de los sueños representados por los collages de Grete Stern en la revista Idilio
12 de marzo No fue un más de violencia estatal. Fue la violencia estatal sin sacarse ninguna careta.
En 1840 Sarmiento rajaba otra vez para Chile y, como escribir y denunciar se le daba tanto como orinar a cielo abierto, escribió en una roca un grafiti querellante: "Las ideas no se matan“ pero en