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Por Stuart Grudgings
Desde Hiratsuka

Los jugadores de Nigeria creen que tienen que derrotar al más difícil rival que tendrán que enfrentar en la Copa Mundial de Fútbol: no la Argentina, sino ellos mismos. El nuevo entrenador, Festus Onigbinde (foto), contratado después de que los nigerianos no consiguieron llegar a la final de la Copa Africa hace unos meses, puso el acento en el trabajo colectivo.
“El ánimo de los jugadores, los entrenadores, el equipo técnico, de todos, es increíblemente alto. Por eso nos reímos cuando la gente dice cosas como que hay problemas en el campo de entrenamiento”, dijo el zaguero Efe Sodje, quien juega en la segunda división inglesa.
“El director técnico tiene sus estrategias y nos ha dicho lo que quiere. Lo más importante es que luchemos juntos en el campo de juego y que tengamos espíritu de equipo”, agregó Sodje, quien será titular ante la Argentina.
“Ellos son un buen seleccionado, tienen grandes jugadores –dijo Sodje–. Pero al director técnico no le preocupan los argentinos, le preocupa su propio equipo.” Sodje es un ejemplo de los nuevos rostros que ha llevado Onigbinde al equipo, a costa de veteranos como Sunday Oliseh, y esto podría haber ayudado a terminar con la complacencia y el descontento evidentes en los últimos años.
Desde que Onigbinde asumió la dirección técnica, el equipo ha disfrutado de una cadena de siete partidos invicto, sin embargo, incluyendo victorias como visitantes contra Irlanda y Escocia.
En Hiratsuka, el seleccionado nigeriano mostró su unidad ayer abrazándose en el círculo central. “En este momento estamos enfrentando la Copa del Mundo, y todos los problemas tenemos que dejarlos a un lado. Nos hemos unido y acordamos deshacernos de cualquier cosa que nos esté perturbando para concentrarnos en el torneo”, señaló Julius Aghahowa, una de las figuras del elenco.