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Con el objetivo de cerrar el cerco sobre los 28.000 grandes morosos que la provincia de Buenos Aires aún no pudo ubicar para intimarlos a que paguen sus deudas con el fisco, el gobierno bonaerense firmó ayer un convenio con la Dirección Nacional de Migraciones por el cual obtendrá los datos de los deudores que viajen al exterior este verano. El acuerdo fue firmado por el subsecretario de Ingresos Públicos, Santiago Montoya, y el titular de Migraciones, Ricardo Rodríguez. A partir de ahora, Migraciones informará a la Dirección de Rentas si alguno de los 35.000 grandes morosos que figuran en la lista que le envió la provincia traspasan los límites del país. Montoya precisó que hasta el momento la provincia pudo ubicar sólo al 20 por ciento de los grandes deudores. “El control de Migraciones será el control del futuro, más adelante nosotros no vamos a necesitar estar en los puertos de salida físicamente porque vamos a poder hacer estos cruces para saber quién salió del país.”