Fidel Castro se hizo un tiempito y recibió a su amigo Hugo Chávez. El presidente venezolano estuvo en Cuba para participar de la cumbre de Petrocaribe que comenzó ayer. Como suele hacer durante sus visitas a la isla, llegó un día antes del comienzo de actividades para encontrarse y charlar con su mentor. Poco se sabe qué sucedió durante las dos horas y media que estuvieron juntos. No hay fotos, ni videos. Chávez tampoco hizo ningún comentario, aunque unas horas después se mostró muy contento al lado de Raúl Castro en la apertura de la cumbre regional.

Según el diario oficial Granma, el único vocero del encuentro entre los líderes, la reunión fue “emotiva”. Los dos líderes discutieron, principalmente, sobre sus proyectos de integración, Petrocaribe y el ALBA (ALternativa Bolivariana de las Américas). El primero es una alianza energética creada por Venezuela hace dos años que beneficia a 13 pequeños países del Caribe y Centroamérica. El segundo es una iniciativa impulsada por Caracas y La Habana para contrarrestar el ya extinto ALCA de Washington.

Chávez le presentó a Castro, siempre según el diario oficial cubano, las propuestas que más tarde esbozaría en la inauguración del la cumbre energética. Una de ellas es que los pequeños países caribeños puedan saldar las deudas que adquieren al comprar crudo exportando bienes y servicios. Este sistema de trueque ya funciona entre Caracas y La Habana. Esta última paga la mayoría de su cuenta energética con los venezolanos con programas médicos, educativos y algunas materias primas.

La última vez que Chávez visitó la isla fue en noviembre pasado. En principio había sido planeada como una escala técnica después de una gira internacional. Sin embargo, mostrando su fidelidad a Castro, aprovechó las horas en el Caribe para verlo. Antes de eso, a mediados de octubre, había hablado con él por teléfono durante su programa dominical Aló Presidente. Aquella emisión fue trasmitida desde Santa Clara para conmemorar el 40º aniversario de la muerte de Ernesto Che Guevara.

A diferencia de la mayoría de los encuentros entre Chávez y Castro, el de esta semana no dejó nuevas imágenes del veterano dirigente cubano, que ya lleva más de 17 meses alejado del poder. Los cubanos vieron por última vez al líder máximo de la revolución el 26 de julio del año pasado, durante las celebraciones por el aniversario de la toma del Cuartel de la Moncada. Cinco días después, una carta firmada de su puño y letra anunciaba al país y al mundo que se alejaría “temporariamente” del poder por una enfermedad intestinal.