Las tres cuadras que rodean al Congreso se convirtieron ayer en zona liberada para la rosca radical. Dos importantes despachos del Senado, un hotel cercano y el comité nacional fueron el escenario de importantes definiciones de cara a la elecciones nacionales de este año. En una cumbre con alfonsinistas, dos dirigentes del cobismo ratificaron que esperarán hasta las primarias de agosto, prometieron que no sacarán los pies de la estructura radical y anticiparon que Julio Cobos lanzaría formalmente su precandidatura en febrero. El vicepresidente buscará así frenar la presión interna y la sangría entre sus seguidores que se generó con la postulación de Ernesto Sanz, quien, en paralelo, llevaba ayer una intensa agenda de reuniones, que incluyeron a la Corriente de Opinión que conduce Federico Storani.

Los integrantes de la mesa chica del alfonsinista Movimiento de Renovación Nacional Gerardo Morales, Juan Pedro Tunessi y Miguel Bazze participaron por la mañana de ayer de la cumbre con los cobistas Juan Carlos Jaliff y Mario Meoni, en un hotel porteño. Los referentes del Morena querían insistir formalmente con la necesidad de que Cobos se anote en las elecciones internas que el radicalismo prevé realizar para abril o mayo y que ya tiene a Alfonsín y a Sanz como competidores confirmados. Morales y el chaqueño Angel Rozas le habían hecho ese mismo requerimiento a Cobos antes de fin de año y quedaron en volver a hablar luego de su viaje por Brasil.

La respuesta que Jaliff y Meoni les dieron fue la misma que viene repitiendo Cobos incansablemente: si las primarias abiertas obligatorias y simultáneas son el 14 de agosto, el vicepresidente no va a participar de ninguna interna anterior a la fijada por ley. Pero los dirigentes del Morena se llevaron otras definiciones más interesantes. Por un lado, los emisarios aseguraron que Cleto no impugnará la interna en la Justicia. Esa idea la habían impulsado públicamente Meoni y Jaliff, con la venia de su líder, que al final la descartó. Por el otro, Cobos ratificó que no jugará por fuera de la UCR, sea cual fuere el resultado de la interna abierta y de las primarias de agosto. Es decir, que si no es el candidato apoyará a quien sea consagrado como postulante del radicalismo.

“Dijeron que van directo a agosto, que no van a la interna de abril y avisaron que de ninguna manera van a impugnar judicialmente y que sea cual fuere el resultado estaremos todos adentro del partido”, resumió el titular del comité bonaerense, Miguel Bazze.

Lo más importante para los alfonsinistas fue el reconocimiento de los dos hombres del círculo más íntimo de Cobos de que el escenario había cambiado con la aparición de la candidatura de Sanz y que, en consecuencia, el vice debía tomar alguna definición para responder a las presiones de su propia tropa y evitar que su ambigüedad termine traduciéndose en una fuga masiva hacia el presidente del comité nacional. Si bien no quisieron anunciarlo ahora, Cobos está analizando seriamente adelantar su lanzamiento antes de que la interna entre Alfonsín y Sanz termine por licuar sus adhesiones.

En el despacho de Sanz en el Senado vieron cómo los alfonsinistas y los cobistas lograron ayer una especie de acuerdo luego de mantener un enfrentamiento durante meses. Chicana de por medio, cerca del presidente del comité consideraban que se trató de una demostración de la preocupación que despiertan los avales recolectados por el senador. “Se pusieron de acuerdo para reinstalarlo a Cleto porque están preocupados por Sanz”, remató un operador del mendocino.

En carrera para instalarse como candidato, Sanz recibió ayer a un grupo de dirigentes de la Corriente de Opinión que lidera el ex ministro del Interior Storani. La próxima semana recorrerá la costa atlántica de la mano del concejal marplatense Maximiliano Abad.