La fórmula presidencial del Frente para la Victoria (FpV) sigue imponiéndose con amplitud a los postulantes de Cambiemos en la provincia de Buenos Aires. La dupla Daniel Scioli-Carlos Zannini consigue el 41,7 por ciento de los votos bonaerenses a presidente, mientras que la suma de Macri, Sanz y Carrió llega al 28,9, lo que significa que hay 13 puntos de ventaja para el oficialismo. El tercer lugar es para Sergio Massa y José Manuel de la Sota, que suman un 19,9 por ciento, en un terreno que es el fuerte del tigrense. En la competencia por la gobernación de la provincia de Buenos Aires, Aníbal Fernández-Martín Sabbatella sigue siendo la fórmula más votada (26,6 por ciento) y mantiene casi la misma distancia que hace un mes respecto de la dupla Julián Domínguez-Fernando Espinoza (17,7). En el medio se ubica María Eugenia Vidal, de Cambiemos (24,6), y Felipe Solá (19,7), de UNA, el frente de Massa y De la Sota.

Las conclusiones surgen de una amplia encuesta de Aresco, la empresa de la familia Aurelio, que entrevistó a 2972 personas en toda la provincia de Buenos Aires, respetándose las proporciones por edad, sexo y nivel económico-social. Las encuestas fueron telefónicas.

La comparación entre las encuestas de Aresco de junio y julio no muestra grandes cambios, aunque la proyección hacia las elecciones generales muestran a Scioli-Zannini (44 por ciento) a las puertas de ganar en primera vuelta. Habrá que ver cómo queda el escenario después de las PASO del 9 de agosto, ya que se supone que en esa elección el FpV sacará esos 13 puntos sobre Cambiemos y eso seguro que producirá un impacto. Detrás del tercer puesto de UNA se ubicaría Margarita Stolbizer, de Progresistas, con algo más del cinco por ciento y Jorge Altamira, del Frente de Izquierda (FIT) con el tres por ciento.

En la carrera por la gobernación bonaerense tampoco hubo mayores cambios. Por de pronto se mantiene la primacía del FpV, cuyas dos fórmulas sumadas le sacan nada menos que 19 puntos a la candidata de Cambiemos, María Eugenia Vidal. Felipe Solá (UNA) aparece a sólo cuatro puntos de Vidal, en un distrito en el que tiene alto conocimiento por cuanto fue gobernador.

En las PASO del FpV, Fernández-Sabbatella mantiene una distancia bastante similar a la de junio, pese a que transcurrió un mes y la fórmula de Julián Domínguez y Fernando Espinoza se ha hecho más conocida. La diferencia en la encuesta de julio es de 8,3 puntos a favor de Fernández-Sabbatella.

Una de las grandes incógnitas es el peso que tendrá el voto a gobernador en la elección. Hay consultores que piensan que el ciudadano entrará al cuarto oscuro y se guiará únicamente por el voto a presidente, sin fijarse quién está en el siguiente tramo de la boleta: si Fernández-Sabbatella o Domínguez-Espinoza. Otros creen que en esas PASO del FpV la elección de gobernador es muy atractiva y que el ciudadano tendrá muy presente a quién quiere votar como mandatario provincial. Por último, está la duda sobre el papel de los llamados aparatos, es decir la presencia de militantes de cada una de las fórmulas que les recordarán a los votantes que apoyen su fórmula a gobernador. Hoy por hoy, la campaña de las dos fórmulas es muy intensa y la carrera por la gobernación está muy presente.

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