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- La elección de hoy se realizará mediante urnas electrónicas, un invento doméstico que por segunda ocasión se utiliza en todo el país. En la primera vuelta fue necesaria la sustitución a última hora de 4274 de estas urnas por problemas técnicos y en un centenar de casos se debió recurrir al sistema de papeletas y urnas. Por eso, y por lo “complejo” del modo digital para algunos electores, hubo retrasos en el cierre de los colegios electorales. Hoy volverán a habilitarse 406.000 urnas electrónicas dispuestas en 335.871 puestos de votación por todo el país.
- Unos 19.000 efectivos de las Fuerzas Armadas brasileñas serán movilizados para reforzar el esquema de seguridad durante la concurrencia a las urnas. Los militares estarán presentes en más de 130 ciudades brasileñas, entre ellas Brasilia, donde el Tribunal Superior Electoral (TSE) ordenó el despliegue de fuerzas por haber detectado “un clima de tensión” entre los simpatizantes de los dos candidatos a gobernador de la capital, el conservador Joaquim Roriz y el petista Geraldo Magela.
- Frente al peligro de los narcos que controlan las favelas en Río de Janeiro, unos 3000 soldados coparán las calles desde temprano y otros 8000 efectivos permanecerán en estado de alerta en los cuarteles. El “superesquema” de seguridad incluye también a 600 fusileros navales y a 500 soldados de la Fuerza Aérea, helicópteros y carros blindados.
- Ocho capos del narco de Río fueron trasladados ayer a un presidio de máxima seguridad. La policía informó de la sospecha de que fuera de las cárceles se estuviera planeando un operativo para sacarlos de prisión durante la jornada de hoy.
- El principal líder del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), Joao Pedro Stédile, descartó una “tregua” en las ocupaciones de haciendas si se confirma la probable victoria de Lula, porque “es como imaginar que el presidente de la CUT (Joao Felício dos Santos), que es amiguísimo de Lula, anunciara que durante el próximo gobierno no habrá paros”. Pero se mostró optimista que “en un gobierno popular de Lula, los problemas se solucionarán más rápidamente”.
- La popularidad de Lula llegó a lo inimaginable: el viernes él y el astro futbolista Edson Arantes do Nascimento “Pelé” coincidieron en el aeropuerto de San Pablo, y mientras el candidato petista era ovacionado por una multitud y posaba para fotografías con sus seguidores, el eterno rey del fútbol mundial pasó completamente inadvertido.