El canciller Héctor Timerman destacó ayer que Israel y Argentina coinciden “en la necesidad de concluir la investigación por el atentado a la embajada y que los autores e instigadores de esos actos sean llevados a la Justicia”. Timerman habló en la Casa Rosada después de que la Embajada de Israel emitiera un comunicado marcando la importancia de seguir adelante con la causa por el ataque ocurrido en 1992, que dejó un saldo de 29 muertos. Además, Timerman leyó un carta que la semana pasada le envió su par israelí, Avigdor Liberman, en parecidos términos. En la Cancillería buscaban precisar que cuando en esas notas se habla de la responsabilidad del Estado argentino, en realidad están hablando de la Corte Suprema, quien lleva la investigación que ayer su titular, Ricardo Lorenzetti, consideró sorpresivamente “cosa juzgada”.

A propósito de este caso hubo una sucesión de hechos ocurridos en los últimos días. El 17 de febrero pasado, Timerman envió sendas cartas a Liberman y al secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en donde reclamaba que “nuestro territorio no sea utilizado para intereses geopolíticos de terceros países”, una referencia a su conflicto con Irán. También les recordaba que, además del atentado a la AMIA, dos años antes Argentina había sufrido el ataque a la Embajada de Israel, cuya responsabilidad correspondía a la Corte.

Liberman contestó a esa carta con otra fechada en Jerusalén el 26 de febrero, en la que –en un contexto de tono muy amable– hablaba de la importancia de “la continuidad de la investigación” tanto del ataque a la embajada como el de la AMIA. “Atribuimos gran significación a una conclusión de la investigación y a que los autores e instigadores de estos actos sean llevados a la Justicia”, consideró el canciller israelí. Ayer Timerman destacó este punto, en cuanto a que Israel está lejos de considerar esa causa como cerrada o cosa juzgada.

En su discurso de apertura de sesiones ordinarias, la presidenta Cristina Kirchner comentó que siempre le había llamado la atención por qué Israel pedía por la AMIA y nunca por la voladura de su propia embajada. De paso, le reclamó que permitiera declarar en la causa AMIA a su ex embajador Yitzhak Avirán, quien alguna vez declaró que Israel ya había dado cuenta de los responsables de ese ataque.

Ayer sucedieron dos cosas. Por un lado, en su presentación en el Capitolio norteamericano, el premier israelí, Benjamin Netanyahu, hizo una enumeración de los ataques producidos por el régimen de Irán entre los que incluyó “la Embajada de Israel en Buenos Aires y el centro comunitario”. Por otro lado, la embajada israelí en Buenos Aires a cargo de Dorit Shavit distribuyó un comunicado. “Es competencia y responsabilidad del Estado argentino investigar el atentado perpetrado contra la Embajada de Israel en Buenos Aires. En los últimos 23 años Israel ha sostenido la importancia de continuar con las acciones pertinentes en miras de llevar a los responsables a juicio. La prosecución de tal fin, sin lugar a dudas, expresa el interés de ambas naciones”, sostuvo allí.

Ayer, Timerman tomó tanto la carta de Liberman como el comunicado de Shavit para concluir que los dos países querían lo mismo. Esto es que la investigación del ataque a la embajada debe continuar. Pasadas las 19.30, desde la Casa Rosada, el canciller expresó que “al gobierno argentino le parece muy importante y significativo que el gobierno de Israel marque la importancia de continuar la investigación sobre ambos ataques terroristas”. “El gobierno argentino también quiere aclarar que la investigación de la causa por el atentado a la Embajada de Israel, por disposición de la Constitución argentina, es responsabilidad de la Corte Suprema y en la causa por el atentado a la AMIA es del Poder Judicial argentino”, agregó. Y concluyó: “Con esta contundente definición del gobierno israelí sobre la necesidad de continuar la investigación queda de alguna manera corroborada la posición que la Presidenta argentina hizo el 1º de marzo en la Asamblea Legislativa, y que coincide plenamente con la realidad de los hechos”.