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El senador por el Frente Amplio Alberto Couriel, autor de la interpelación que llevó recientemente al reemplazo del ministro de Economía, reflexionó sobre la habilidad del FMI para tomar medidas que terminan funcionando “en contra de nuestros países”, como obligar al Banco Central del Uruguay a dar a conocer “diariamente el nivel de las reservas”, lo que realimentó la crisis financiera uruguaya y la profundizó.
El legislador hizo estas declaraciones a una agencia argentina y aclaró que no quería opinar sobre la situación de su país a partir del feriado cambiario declarado ayer en Uruguay. De todos modos, Couriel fue muy crítico sobre el papel de Estados Unidos en las crisis de la Argentina, Brasil y Uruguay. Indicó, por ejemplo que ante la posibilidad de un triunfo de Luiz Inacio da Silva, Lula, en Brasil “y que eso signifique que Estados Unidos no pueda tener un predominio total, prefiere que se caiga la democracia en Brasil antes que gane la izquierda”.
“Ni Argentina, ni Brasil ni Uruguay pueden ser considerados por Estados Unidos como integrantes del Eje del Mal del que habla el presidente George Bush, pero a veces me quedan dudas”, reflexionó el senador y economista del Encuentro Progresista-Frente Amplio sobre las actitudes del gobierno norteamericano ante las crisis en los países del Cono Sur.
Indicó también que el secretario del Tesoro norteamericano, Paul O’Neill, “echó nafta al incendio” de la crisis regional cuando advirtió la posibilidad de que nuevos préstamos a estos países vayan a parar a cuentas bancarias en Suiza. “El presidente brasileño, Fernando Henrique Cardoso -señaló Couriel– le dio la única respuesta apropiada: ‘o se retracta o no lo recibo’”.
Con respecto al cambio de ministro de Economía, afirmó que “nunca quisimos ningún tipo de colapso ni de caos financiero, en la propia interpelación fui cuidadoso con el tema”. Al mismo tiempo destacó la designación del senador Alejandro Atchugarry como nuevo titular de Economía, a quien calificó como “un político, conocedor de la materia económica, un articulador, por lo que el sistema político le dio una carta de crédito, y una nueva tregua”.