“Estamos asombrados por la detención de mi hermano. Estamos mal, estamos muy mal, no podemos creer en todo lo que se está diciendo. Mi hermano es inocente”. Los tres hermanos de Santos Clemente Vera se hicieron presentes ayer en la Ciudad Judicial de esta ciudad, donde en la planta baja se realizaron las primeras indagatorias. Celedonio Vera, acompañado por sus dos hermanas, le dijo a Página/12 que el 15 de julio pasado, cuando habría ocurrido el doble crimen, “estaba trabajando, como todos los días”. Precisó que su hermano es jardinero en una casa del country Bella Vista, en San Lorenzo, y no “jefe de mantenimiento” como dijo la policía y salió publicado en la prensa. “Mi hermano nunca tuvo un problema con la Justicia, somos una familia decente, trabajadora.”

Santos Clemente Vera, de 37 años, vive con sus padres en la zona donde ocurrió el crimen y con sus hermanos se encarga del cuidado de “algunos animalitos que tenemos en el campo, de eso vivimos”. Los Vera aseguraron que “es imposible que nuestro hermano le haya dado pistas falsas a la policía, como dicen. La policía y los diarios dicen muchas cosas, pero no es cierto que vaya a dar una información falsa, cuando él conoce bien el cerro. Somos sanlorenceños, cómo no vamos a conocer el cerro. El es inocente, es injusto lo que pasa”.

Ayer también prestó declaración indagatoria Omar Darío Ramos, de 47 años, quien trabaja como guía para la empresa Puma Expeditions, que tiene la concesión de la quebrada de San Lorenzo. Trascendió que sus dichos “no tuvieron mucha trascendencia”, aunque es posible que no se le haya dado difusión a la declaración, porque el imputado conoce bien cómo fue la ruta que siguió el arma que sería la que se usó en el doble crimen. Ese es un punto central para saber quiénes fueron los que tuvieron un rol principal en los hechos.