Los trabajadores del restaurante porteño Lalo de Buenos Aires presentaron ayer una denuncia penal contra la firma “por estafa y defraudación”, mientras mantienen ocupado el local a la espera de novedades sobre el desalojo que quedó suspendido temporalmente en la madrugada del martes. Lo comunicaron en el marco de una conferencia de prensa realizada ayer al mediodía junto a legisladores de la Ciudad, dirigentes y personalidades de la cultura.

“Hicimos una denuncia penal contra Juan Eduardo González Costa, el famoso Lalo y cara visible de la firma, y su contador, Guillermo Pereyra, por retener tres meses de haberes y cuatro años de aportes”, afirmó el abogado de los trabajadores, Hernán Bianchi. Según el letrado, Pereyra figura en lugar de González Costa como dueño del restaurante Chiquilín, del cual se desprendió Lalo de Buenos Aires, “con el fin de esconder sus bienes para no pagar lo que le debe, no solo a los trabajadores, sino también a los dueños del inmueble y al Estado nacional”.

La denuncia fue radicada en el Juzgado de Instrucción Nº 9, a cargo del juez subrogante Manuel Gorostiaga. Según Bianchi, desde que los empresarios abandonaron el restaurante no se ha presentado nadie del Fondo de Comercio Cabral 2426 S.A., ni han respondido a las citaciones. Luciano García, vocero de los trabajadores afirmó: “Esperamos que se presenten a la audiencia laboral que tenemos el viernes en el Ministerio de Trabajo”.

Respecto del desalojo que pesa sobre el local, ubicado en Montevideo 355, dispuesto por el juez civil nacional Pablo Torterolo y suspendido temporalmente el martes pasado, Bianchi aseguró que “no hay aún novedades luego de que se presentó un amparo en el fuero laboral”.

El abogado Bianchi dijo que los trabajadores están esperando ser convocados a una audiencia judicial para avanzar en un posible acuerdo con los dueños del inmueble. “Hasta el momento los trabajadores, con la ayuda de legisladores y diputados, están negociando por fuera de la vía legal”, explicó.

Al respecto, el legislador Juan Cruz Campagnoli (Nuevo Encuentro) comentó que “el tema del acercamiento con los dueños está mejor, porque Eladio González, el único de los cuatro que no quiere firmar, prometió reunirse con nosotros”. Los trabajadores proponen un contrato de alquiler con adelanto de seis meses y garantía hipotecaria. Mañana a las 18 se realizará un nuevo festival solidario en la puerta del restaurante.