SOCIEDAD › LA COMISION ENVIADA POR EL VATICANO SANCIONO AL PARAGUAYO ROGELIO LIVIERES

Tarjeta roja para un obispo

Livieres se había enfrentado a su arzobispo por proteger a un sacerdote argentino sospechado de pedofilia. Los investigadores enviados por Francisco lo castigaron y van a enviar un informe negativo a Roma.

Los investigadores, uno español y otro uruguayo, anunciando sus medidas en Ciudad del Este.

Por decisión del Vaticano, el polémico obispo paraguayo Rogelio Livieres tiene prohibido seguir ordenando sacerdotes en su diócesis de Ciudad del Este. La medida fue dispuesta por los investigadores designados por el papa Francisco para intervenir ante las denuncias por abuso sexual que involucran al sacerdote argentino Carlos Urrutigoity, uno de los vicarios de Livieres. El nombre del obispo Livieres ha estado en todos los medios periodísticos luego de haber dicho, en público, que el arzobispo de Asunción, Pastor Cuquejo, es “homosexual”. El escándalo dio motivo a la llegada a Paraguay de una comisión investigadora integrada por el cardenal español Santos Abril y Castelló, y el arzobispo uruguayo Milton Luis Tróccoli, quienes concluyeron ayer una intervención de una semana y decidieron sancionar a Livieres para que deje de ordenar sacerdotes.

Esta es una primera medida contra Livieres, en el marco de un proceso que busca determinar la veracidad de las denuncias por abuso sexual. Castelló, presidente de la Comisión Cardenalicia de Vigilancia del Instituto para las Obras de Religión (IOR), explicó que el informe que produjeron será elevado al papa Francisco, quien dispondrá las medidas a seguir de ahora en más.

Livieres salió en todos los diarios cuando dijo que el arzobispo Cuquejo había sido señalado como homosexual y que por ese motivo habría estado a punto de ser expulsado de la Iglesia Católica. El altercado verbal comenzó cuando Cuqueño opinó que debería reabrirse una investigación contra el sacerdote argentino Carlos Urrutigoity, uno de los vicarios del obispo Livieres, sospechado de estar implicado en casos de pedofilia en Estados Unidos.

La prensa estadounidense publicó que Urrutigoity fue acusado en 2002 por un estudiante de la Academia Saint Gregory en Pensilvania de haberle ofrecido “dirección espiritual” a cambio de dormir con él y más tarde de haberlo abusado sexualmente. El obispo y el arzobispo paraguayos se enfrentaron también por los manejos de fondos y por los criterios en la formación de sacerdotes, situación que determinó que el papa Francisco decidiera iniciar una investigación.

La sanción contra Livieres se aplicó, a pesar de su promesa de pedirle disculpas a monseñor Cuquejo, por haber recordado la situación vivida cuando dijeron que era homosexual. Livieres se había referido al tema durante la marcha “pro vida” que se hizo hace un tiempo en Ciudad del Este. Las disculpas que pediría Livieres fueron anunciadas, en un reportaje, por el arzobispo coadjutor de Asunción, Edmundo Valenzuela, representante de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP).

Valenzuela dijo que ese acercamiento entre los prelados se logró gracias a que el tío de Livieres, monseñor Jorge Livieres Banks –también involucrado en escándalos sexuales–, habló con él y le llamó la atención por sus expresiones. “Esa conversación entre tío y sobrino le hizo muy bien a monseñor Rogelio. Aceptó encontrarse con monseñor Pastor Cuquejo, acepta pedirle disculpas y pedirle perdón. Es una cosa muy grande y muy linda”, manifestó monseñor Valenzuela.

“Damos un hermoso testimonio de que podemos ser pecadores, pero no corruptos”, opinó Valenzuela. De todas maneras, a pesar de los buenos oficios entre los miembros del clero, las diferencias entre Livieres y Cuquejo se mantienen, porque tienen que ver con la diferente postura que ambos tienen respecto del sacerdote argentino Carlos Urrutigoity. Cuquejo había sugerido, respecto de Urrutigoity, que el caso de abuso tenía que aclararse. Fue entonces que Livieres le respondió a Cuquejo: “Tendría que ser mucho más prudente en este tema, casi fue tirado fuera del Arzobispado por las acusaciones de homosexualidad”.

Los religiosos enviados por el papa Francisco para investigar las denuncias e interceder entre los obispos enfrentados, además de sancionar a Livieres, les pidieron a ambos que se mantengan “fieles a la doctrina de la Iglesia” y se llevaron a Roma un informe de situación que determinarán los pasos a seguir respecto de las denuncias por abuso sexual.

Compartir: 

Twitter

 
SOCIEDAD
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.