00:29 › GARIN

Los trabajadores mantienen la imprenta Donnelley en marcha

Los 400 empleados, que la empresa amenaza con dejar en la calle, decidieron en asamblea hacer valer la conciliación obligatoria dictada ayer por la cartera laboral bonaerense e ingresaron a la planta de la firma norteamericana para continuar con sus tareas. "Hemos puesto en funcionamiento las máquinas, estamos respetando las leyes", remarcó el delegado Jorge Medina. Los delegados serán recibidos mañana por el ministro de Trabajo, Carlos Tomada.

El delegado pidió "tranquilidad a los clientes" que imprimen en RR Donnelley sus publicaciones y aseguró que se cumplirá con lo pactado. "Incluso estamos cerrando nuevos trabajos en las próximas horas", destacó Medina.

En ese sentido, adelantó que los trabajadores respetarán el horario de trabajo y "cada turno cumplirá con su horario habitual". Además, el delegado sostuvo que comenzaron a planificar "de qué manera poder levantar la desinversión las maquinarias" para evitar cualquier desperfecto.

Respecto del accionar de la empresa, Medina remarcó que los trabajadores cobraron sus haberes "el último día hábil del mes pasado" y, en esa oportunidad, "ninguna autoridad informó sobre el cierre". La firma norteamericana había presentado meses atrás un informe de crisis que había sido rechazado por el sindicato y el ministro de trabajo, según indicó ayer un comunicado de la Comisión Interna de trabajadores.

Los más de 400 trabajadores de la planta de Garín se presentaron ayer a trabajar y encontraron un mensaje en la puerta de entrada: "La crisis es insuperable. No hay más alternativas viables y tras 22 años de actividad en el país nos vemos obligados a cerrar".

Los obreros habían advertido desde ayer que la empresa busca "una quiebra fraudulenta y extorsiva, para que los empleados vayan a retiro voluntario en forma masiva e inclusive no descartamos que la empresa aproveche la actual situación con despedidos en la calle -como el caso de lear-, para conseguir un beneficio impositivo o subsidio por parte del gobierno".

"Hace meses venimos denunciando el vaciamiento que estaban haciendo, derivando todos los trabajos a otros talleres para generar el ambiente de crisis y desazón en los trabajadores", comentaron los delegados en diálogo con varios medios.

El Ministerio de Trabajo bonaerense dictó por la tarde la conciliación obligatoria en una audiencia que se realizó en La Plata y de la que participaron abogados de la empresa, trabajadores y representantes del gobierno bonaerense.

El delegado René Córdoba aseguró que la empresa "miente diciendo que está en quiebra, cuando a nivel mundial reportaron ganancias por doscientos dieciocho millones de dólares el año pasado, y mayores aún este año". Y resaltó que la firma "está denunciada por sindicatos de todo el mundo por su método de cerrar plantas de un día para el otro".

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