El gobierno de Estados Unidos anunció nuevas sanciones contra Corea del Norte, a la que acusa de haber utilizado un arma química para asesinar en el aeropuerto de Kuala Lumpur a Kim Jong-nam, hermanastro del líder norcoreano Kim Jong-un, apenas horas después del anuncio de una cumbre de máximo nivel entre las dos Coreas.

Las medidas adoptadas por washington, que no especificó en concreto, son producto de una investigación que demostró que a Kim Jong-nam lo asesinaron con una dosis de gas nervioso vx, lo que acarrea sanciones automáticas en cumplimiento de una ley de 1991 sobre armas químicas y biológicas, informó  el Departamento de Estado. El hermanastro del líder norcoreano cayó fulminado en el aeropuerto de la capital de malasia, tras ser envenenado por dos mujeres el 13 de febrero de 2017. Pyongyang siempre negó tener alguna responsabilidad con el crimen.

Estados Unidos “condena duramente el uso de armas químicas para perpetrar un asesinato”, dijo la vocera de la cartera, Heather Naert. Esta forma de quebrantar las normas internacionales sobre el uso de armas químicas demuestra “la naturaleza temeraria de Corea del Norte”, añadió.

Las sanciones de washington se suman a las ya existentes contra el país comunista y son producto de una investigación concluida el 22 de febrero, pero llegan en momentos en los que las dos coreas muestras avancen sustanciales en el diálogo bilateral.

El martes, tras una histórica cumbre en Pyongyang, una delegación surcoreana de primer nivel y Kim Jong-un dieron una contundente señal: acordaron realizar una cumbre entre los presidentes de ambos países en el mes de abril. Según informó la delegación surcoreana a su regreso del norte, el líder norcoreano se mostró dispuesto a negociar con Estados Unidos su desnuclearización, un ofrecimiento que el presidente estadounidense, Donald Trump, acogió con cautela, pero con la expectativa de que pueda dar frutos.

“Creo que son sinceros, pero creo que son sinceros también debido a las sanciones y a lo que estamos haciendo respecto a Corea del Norte, y la ayuda que hemos recibido de China”, dijo Trump el martes en una rueda de prensa en la que no se comprometió a iniciar una negociación formal con Pyongyang. En esa línea, moderando también el optimismo, el presidente surcoreano, Moon Jae-in, consideró ayer que el anuncio del norte sólo representa “el punto de partida” para lograr la desnuclearización.

En una reunión en Seúl con los representantes de los cinco principales partidos de la oposición, con quienes Moon trata de sellar un acuerdo para acompañar las gestiones bilaterales. E insistió en que el objetivo de su gobierno no es que el vecino del norte congele su programa atómico sino “la completa desnuclearización” de la península.