La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) le pidió ayer al presidente de FIFA, Gianni Infantino, que se adelante para el Mundial Qatar 2022 la puesta en marcha del nuevo formato de participación con 48 equipos, de modo de tener aseguradas seis plazas sudamericanas. En el marco del 68º Congreso de la Conmebol celebrado en un hotel de Puerto Madero, el presidente de la federación, el paraguayo Alejandro Domínguez, le entregó en mano a Infantino el pedido firmado por las diez asociaciones sudamericanas afiliadas a la entidad.

La intención de Sudamérica es contar para las próximas eliminatorias la posibilidad de tener seis cupos directos, y un repechaje para el Mundial de 2022, que tendrá como sede a Qatar. La Federación de Asociaciones de Fútbol (FIFA) ya aprobó el nuevo formato de competición, pero tenía planeado presentarlo en el Mundial de 2026, que aspiran a organizar México, Estados Unidos y Canadá.

“Nuestro sistema de eliminatoria es justo pero a la vez ingrato, por eso quería pedirle en nombre de la Conmebol que adelante la ampliación de los cupos”, expresó Domínguez durante su discurso en el congreso de la entidad. Esta petición salida del protocolo contó con el guiño del presidente de UEFA, el esloveno Aleksander Ceferin, a quien Domínguez le pidió públicamente su apoyo. Además de las autoridades del fútbol europeo, asistieron como invitados el canadiense Víctor Montagliani, presidente de Concacaf; y Ahmad Ahmad, de Madagascar, por la Confederación Africana. 

El nuevo formato de 48 seleccionados en el Mundial fue impulsado por el propio Infantino, y aprobado en el último Consejo de la FIFA.

Dentro de lo protocolar, los congresistas, que por AFA fueron representados por Víctor Blanco, presidente de Racing, y Marcelo Achile, titular de Defensores de Belgrano, aprobaron los estados contables y el presupuesto 2018. Los discursos se centraron en la transparencia que ahora atraviesan las entidades, y en proyectar un futuro más próspero para el fútbol luego del sacudón que significó el FIFA Gate que estalló en mayo de 2015.

La presencia de las máximas autoridades del fútbol mundial fue también una señal de apoyo tanto para Domínguez, quien el próximo 11 de mayo será reelegido hasta 2022, y para Infantino, quien pretende hacer lo mismo en FIFA. Infantino elogió la “solidaridad y unidad” que hay en Conmebol, y remarcó que esa unión “fortalece al fútbol mundial”. “Es un gran placer y un honor estar en Sudamérica, estoy en la casa del fútbol”, afirmó Infantino en su discurso. “Quiero felicitar a todos en la Conmebol, por el gran trabajo y por fortalecer una de las confederaciones más importantes”, dijo, al insistir en que la FIFA y la federación sudamericana están “en una situación parecida”, y se deben “enfocar en el futuro donde hoy es todo transparente”. “Estamos trabajando en la transparencia de la FIFA cada día, y hay que seguir trabajando en todas las áreas del fútbol: selecciones, clubes, fútbol de mujeres y juveniles”, apuntó Infantino, quien pretende renovar su mandato en las próximas elecciones. 

Tapia aseguró que los dirigentes sudamericanos deben continuar “con el compromiso de la transparencia y de creer en grande”, tras los casos de corrupción ocurridos en la FIFA durante la gestión del suizo Joseph Blatter. “Tenemos que seguir todos juntos con el compromiso de la transparencia y de creer en grande”, expresó el máximo directivo de la AFA.

“Los dirigentes del fútbol sudamericano tuvimos la sabia decisión de haber mantenido al señor Alejandro Domínguez como presidente de la Conmebol”, continuó. “Todos tenemos la misma mancha, y en diferentes órdenes a todos nos pasó lo mismo: esta difícil tarea de construir para hacer un fútbol mejor, profesional y más transparente”, añadió Tapia.