El presidente Mauricio Macri y su colega Sebastián Piñera se prodigaron elogios durante la visita del mandatario chileno a Buenos Aires. Los empresarios sentaron las bases de la relación bilateral un mes después de la asunción de Piñera y coincidieron en liberar el comercio bilateral. También resaltaron que ambos presidentes comparten una “misma visión”, tanto regional como mundial. No faltaron las críticas a Venezuela.

Los mandatarios celebraron el acuerdo comercial alcanzado entre ambos países, hablaron del desarrollo y de su lucha “para reducir la pobreza”. “Esta dimensión bioceánica que tenemos en la región tiene claramente una oportunidad de avanzar en estrechar esfuerzos en Mercosur y la Alianza del Pacífico”, destacó Macri durante la conferencia de prensa conjunta. “Yo ya estoy como observador y veo vocación entre los integrantes del Mercosur de avanzar en las conversaciones”, afirmó el presidente trasandino, quien desde que asumió intenta inclinar al bloque hacia la derecha, con el aval del golpista Michel Temer.

Como en los últimos encuentros presidenciales, Macri dedicó un pasaje de su discurso a denostar a Venezuela. “Coincidimos en que hay que ayudar a que la democracia reine en toda la región y que lo que pasa en Venezuela llegue a su fin, restableciendo un gobierno democrático con elecciones transparentes", dijo el mandatario argentino, quien durante la visita de Mariano Rajoy adelantó que desconocería los resultados de los comicios que se celebrarán el 20 de mayo.

A su turno, Piñera celebró que Argentina y Chile “comparten valores y visiones”. “Compartimos el valor de la democracia, de la libertad del estado de derecho y de los derechos humanos, y también las visiones sobre cómo enfrentamos los problemas y los desafíos del futuro”, subrayó el mandatario que, la semana pasada, se retiró de la UNASUR junto con otros 5 países.

“Nosotros, la generación del Bicentenario tenemos la responsabilidad de conquistar el desarrollo y derrotar la pobreza. La meta que nos hemos impuesto tanto en Argentina como en Chile es lograrlo antes de que termine la década”, aseguró el multimillonario chileno, quien agregó que uno de los objetivos de ambos países será "desatar la fuerza de la libertad”.

Piñera, por último, agradeció que Macri, ayer, hubiera sacrificado "20 minutos del partido de Boca”, por la cena que le ofreció en Olivos junto con su mujer.