Taxistas de la Asociación de Mujeres Conductoras (AMC) denunciaron por amenazas y asociación ilícita a los choferes de la parada de la terminal de ómnibus Mariano Mareno. La presentación ingresó ayer al Ministerio Público de la Acusación (MPA) y se sumó a la que hicieron las concejalas Fernanda Gigliani y María Eugenia Schmuck, la semana pasada. Desde mañana, podrán presentarse en Fiscalía (Montevideo al 1900) otros y otras trabajadoras del servicio que hayan pasado por situaciones puntuales. Por el momento, la causa está en manos del fiscal de Causas con Imputados No Individualizados, Marcelo Vienna, pero podría pasar a otra unidad fiscal. Schmuck recibió una carta documento de la cooperativa que intenta defenderse de las acusaciones. "Un acto intimidatorio no modificará nuestro compromiso", aseguró la edila.

El escándalo por hostigamientos en la Terminal se encendió la semana pasada, cuando se conoció el video de un taxista que fue increpado y agredido por los choferes en la estación de Cafferata y Santa Fe. Fue por eso que las edilas presentaron pruebas en la Fiscalía de los delitos que se cometen en el lugar, con un "modus operandis para apropiarse del espacio público atentando contra el derecho de los usuarios, trabajadores y lo que establece la normativa", dijeron.

Soledad fue una de las primeras afectadas y ayer habló con Rosario12 como una de las denunciantes. "El 2 de abril subí un video porque tuve un incidente: una pasajera se quería ocupar conmigo, en la Terminal, y yo le dije que le consultara a los de más adelante si no tenían problema. Los que estaban adelante le dijeron que no, la trataron mal y cuando me lo contó le dije que vayamos igual, porque si ella paga el taxi está en todo su derecho a elegirlo", aseguró. "Cuando nos estábamos retirando recibí insultos en tono amenazante y subí el video a Facebook, que se viralizó". Tras ello, recibió comunicación de la AMC (que abarca a conductoras no solo de taxis), para unirse. "Entre todas, decidimos ir casi a fines de abril a parar en grupo a la terminal, por una cuestión de seguridad, por miedo. El 2 de mayo tuvo problemas nuestra compañera Eliana. No nos dimos por vencidas y seguimos adelante, entonces decidimos ir a ver a la concejala Gigliani y contactar a Mónica Alvarado (secretaria de Transporte y Movilidad de la Municipalidad), para que se respete el control fijo de 24 horas", reclamó.

Lo que reclaman, es que "haya algún tipo de sanción" para el grupo. En el Palacio Vasallo tienen la misma sintonía. "A la 'cooperativa M. Moreno' no se le ocurrió mejor idea que enviarnos carta documento para que dejemos de denunciar lo que es evidente para todos. Nos piden que nos manejemos con 'tacto' para 'mantener la paz social'. Claramente, una amenaza inadmisible. No nos pararán", escribió Schmuck en su cuenta de Twitter, ayer.