Los maestros agrupados en el Frente de Unidad Docente Bonaerense comenzaron la segunda jornada de paro, en el marco de la protesta convocada ayer por las dos CTA y el gremio de Camioneros, entre otros. Los docentes piden ser convocados nuevamente por la gobernadora María Eugenia Vidal para retomar la negociación paritaria, que desde el último encuentro, hace 50 días, está paralizada.
“Es mentira que querían negociar con los chicos en las aulas. Hace 56 días los chicos están en las aulas y no nos convocan”, afirmó esta mañana Roberto Baradel, titular del Suteba, en una conferencia de prensa brindada entre los seis gremios que integran el Frente. "Cuando decíamos que el 15 por ciento de aumento salarial no alcanzaba, no es que éramos genios. Al principio planteamos el 20 por ciento y hoy eso tampoco alcanza. Con suerte vamos a tener un 30 por ciento de inflación", planteó el dirigente.
De los cuatro gremios que integran ese espacio, tres de ellos -el Sindicato Único de Trabajadores de la Educación (Suteba), la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB) y la Unión de Docentes bonaerenses (Udocba)- comenzaron la medida de fuerza ayer, mientras que los docentes privados de la provincia nucleados en Sadop se sumaron a la jornada de paro hoy.
Según un relevamiento realizado por la Federación de Educadores Bonaerenses, la adhesión al paro fue contundente: entre el 87 y el 90 por ciento de las escuelas estuvieron cerradas desde ayer. Sin embargo, desde el Ministerio de Educación de la provincia dijeron que sólo el 44 por ciento de los establecimientos educativos se adhirió a la medida.
Además de la reapertura de paritarias, los docentes denunciaron la falta de cobertura de cargos, problemas de infraestructura e irregularidades en la aplicación del nuevo sistema de licencias médicas. A pesar de ser rechazada por los gremios, la administración de Vidal aplicó de manera unilateral su propuesta y le depositó a los maestros un diez por ciento de aumento a cuenta del futuro aumento.
