Un grupo de empleados públicos de la provincia fue reprimido anoche luego de que los trabajadores estatales realizaran un escrache al ministro de Gobierno, Federico Massoni, a la salida de un programa de televisión en Puerto Madryn. El dirigente de ATE Juan Altamiranta quedó inconsciente después de que agentes de la policía provincial, flanqueados por los custodios de Massoni, lo tiraran al suelo para reducirlo. Acto seguido, la esposa de Altamiranta, delegada docente, quien cuestionó a viva voz el accionar policial fue trasladada a la Comisaría Primera de Madryn, de donde fue liberada poco después ante la presión de los manifestantes.

Tras la represión del martes pasado a los docentes que se manifestaban frente a la Casa de Gobierno, en Rawson, los efectivos provinciales volvieron a la carga contra los trabajadores del Estado. Roberto Cabeda, secretario general de ATE Puerto Madryn, explicó ante este diario que los trabajadores en conflicto decidieron escrachar a Massoni luego de que el funcionario se refiriera a los empleados públicos "con desparpajo" durante un reportaje concedido al Canal 12. 

Massoni, por su parte, radicó una denuncia contra Altamiranta y su esposa por "resistencia a la autoridad y agresión". El funcionario asegura haber sido víctima de un intento de agresión por parte de los manifestantes y amenazas de parte de la docente.

Altamiranta no llegó a ser traslado a la comisaría porque vecinos y militantes e impidieron su detención. Tras la intervención del Intendente Ricardo Sastre, su mujer fue liberada. 

Altamiranta recordó que “tuvo un sofocón de presión”. “Para reducirme, se me tiraron dos o tres policías encima y me desvanecí. Cuando vi a mi mujer con esposas y me acordé que nuestras dos hijas estaban solas en casa”, explicó. Aclaró, además, que tanto él como los otros militantes, sólo intentaron acercarse a Massoni para manifestar al funcionario que había comparado la toma de un edifico público con una “violación consentida”. “Hablar de tomas pacíficas es contradictorio. Si hay una toma, hay un acto de violencia por sobre la voluntad del otro. Es como si yo dijera que esto es una violación consentida”, dijo a principios de junio ante los reclamos de los estatales que ocupan diferentes edificios públicos. 

Cabeda inscribió lo sucedido en el contexto general de represión a la protesta social. “Lo que está viviendo la sociedad de Chubut está superando todos los límites. Es una situación de ajuste sin igual contra los estatales”, denunció el dirigente. El martes, los docentes, que esperaban ser recibidos por funcionarios del gobierno de Mariano Arcioni, fueron golpeados con palos y balas de goma. “Nosotros reclamamos la reincorporación de los despedidos y que nos incluyan en las paritarias”, completó Cabeda. 

En ese contexto, hoy hubo una nueva manifestación en Rawson en repudio a la represión y en rechazo al ajuste. Allí, los estatales  reclamaron la renuncia de Massoni, responsable de las fuerzas de seguridad provinciales.