Si pude nacer en una familia que me esperaba.

Si tuve padres que me amaron.

Una casa fresca en verano y cálida en invierno.

Si tuve escuela, guardapolvos, cuadernos, libros.

Si tuve médicos cuando las gripes y las anginas.

Si tuve juguetes, paseos, plazas, circos.

Vacaciones en las sierras y en el mar.

Si tuve una Primera Comunión con vestido largo y blanco.

Si tuve fiesta de quince y amigas y romances.

Si amé y me amaron.

Si tuve un trabajo digno del cual vivir.

Si puedo hablar con gentes con las que tengo afinidades?

Si no te esperaron con alegría.

Si eras una carga más, entre muchos.

Si en la casilla de chapas el viento se colaba y las goteras humedecían todo.

Si la escuela era un lujo que no te podías permitir, cuando saliste a cirujear.

Si cuando te enfermabas no había remedios.

Si no tuviste juguetes.

Si el centro lo conociste como lugar para mendigar desde chico.

Si el Templo era un lugar al que ir a pedir.

Si no tuviste más fiesta que la del Poxirran.

Si te violentaron y abusaron desde siempre.

Si no pudiste conseguir que te amaran.

Si te mandaron a robar con una faca.

Entonces ¿por qué me asombro cuando me atravesás con ella?

 

*Psicoanalista. Poema escrito en marzo de 2012.