Mauricio Macri siempre privilegió al campo y defendió a capa y espada la baja de las retenciones, pero apremiado por la corrida tuvo que dar marcha atrás. Un día después de la visita de la misión del Fondo Monetario Internacional, que le demandaba que revisara esa política, el Gobierno hizo anuncios en ese sentido. Las medidas fueron dadas a conocer por el Ministerio de Hacienda, que afirmó que redundarán en un ahorro fiscal de 65.500 millones de pesos durante este año y el próximo, y entre ellas sobresale la suspensión por 6 meses la baja de las retenciones para aceites y harinas de soja.

Además de suspender la baja de las retenciones para los derivados de soja, el equipo económico decidió eliminar el Fondo a través del cual se transfería a provincias y municipios el 30 por ciento de la recaudación de los derechos de exportación a la soja, y reducir en un 66 por ciento el monto total pagado en concepto de reintegros a la exportación, de acuerdo con un esquema diferenciado por producto.

Las medidas están contenidas en tres decretos que serán publicados en el Boletín Oficial. Hacienda consignó que así se generará un ahorro fiscal estimado de 12.500 millones de pesos para lo que resta de 2018 y 53.000 millones de pesos para el 2019.

Con relación a los derechos de exportación a la soja, se mantiene la baja prevista en la alícuota de los granos, pero se suspende por 6 meses la baja establecida para aceites y harinas.

Según la información oficial, las alícuotas a la soja se vienen reduciendo de forma sostenida, desde el 35% en 2015 para el poroto de soja al 26 por ciento actual, previendo su convergencia al 18 por ciento en diciembre de 2019.

En cuanto al aceite y las harinas, la alícuota se redujo desde el 32 por ciento en 2015 al 23 por ciento actual y también convergerá al 18 por ciento en diciembre de 2019.

Los ingresos adicionales para la Nación por esta medida son de 1.500 millones de pesos en 2018 y 12 mil millones en 2019, estimó Hacienda.

Por otra parte, a través de un decreto de necesidad y urgencia, se elimina el Fondo Federal Solidario, a través del cual se transfería a provincias y municipios el 30 por ciento de la recaudación de los derechos de exportación a la soja.

Este Fondo fue creado en 2009, cuando las provincias recibían la cuarta parte de la recaudación de impuestos nacionales, indicó el Ministerio, que agregó que, ahora, las provincias "han pasado a recibir un tercio de los recursos nacionales y continuarán aumentando su participación en los próximos años, lo cual torna innecesaria la continuidad de este mecanismo de compensación. La reducción de los reintegros a la exportación, que se deduce de recaudación coparticipable, compensa parcialmente la pérdida de ingresos". Con esta decisión, el ahorro fiscal para la Nación es de 8.500 millones de pesos en 2018 y de 26.500 millones de pesos en 2019.

Además, Hacienda dispuso reducir un 66 por ciento el monto total pagado en concepto de reintegros a la exportación, de acuerdo con un esquema diferenciado por producto. Para justificar las medidas se explicó que los reintegros a la exportación "justifican su existencia en la vigencia de impuestos indirectos que se acumulan durante el proceso de producción y que no tienen una devolución al exportarse" y que "la reforma tributaria y el pacto fiscal, que reducen los impuestos al cheque y a los ingresos brutos, generan el espacio para que dichos reintegros puedan ser reducidos".

El ahorro fiscal (coparticipable entre Nación y provincias) de esta medida fue calculado en 5 mil millones de pesos en 2018 y 29 mil millones de pesos en 2019.

"Estas tres decisiones se enmarcan en el proceso de convergencia al equilibrio fiscal para 2020, que serán luego complementadas en el proyecto de Presupuesto por medidas relacionadas con las erogaciones del Gobierno Nacional", afirmó Hacienda.