La crisis económica llevó a una notable caída del consumo interno que también se visibilizó en los arbolitos esta Navidad: las ventas de juguetes registraron una baja de casi 20 por ciento con relación a 2017. De acuerdo a un informe elaborado por la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), todos los segmentos presentaron bajas por la recesión que atraviesa la economía Argentina. 

La entidad midió una reducción de las unidades vendidas del 19,8 en comparación con el año pasado 2017. Según señaló, la caída se produjo pese a las "diferentes promociones con bancos y comercios con el objetivo de estimular las ventas”. 

El presidente de la cámara, Matías Furió, informó que el gasto promedio por juguete alcanzó este año los 400 pesos y que la industria nacional, al haber resignado rentabilidad, incrementó los precios sólo un 37 por ciento  interanual a pesar de los aumentos en los costos de producción, los cuales acumularon un 200 por ciento, principalmente por el incremento de la materia prima.

CAIJ también hizo hincapié en el efecto directo que produjo en el mercado interno el aumento de las importaciones dado que, antes de la primera disparada del dólar a principios de mayo, se registró en el período enero-abril un 45 por ciento de incremento en la entrada de productos extranjeros respecto del mismo período de 2017.   

Los retrocesos más significativos se registraron en la comercialización de artículos del segmento denominado Primera Infancia, que disminuyeron un 16,8 por ciento, pero también en material educativo (-15,3 por ciento), siendo los dos rubros que acumulan más del 40 por ciento de participación en el mercado.

La venta de juegos de mesa experimentó en la medición interanual una baja del 16,8 por ciento y las de autos y camiones, un retroceso del 17,5 por ciento. Los que más cayeron -aunque tienen poca relevancia en el mercado- fueron: instrumentos musicales de juguete, con un derrumbe del 33,8 por ciento y juguetes con radio control y motor incorporado, con el 31,8 por ciento .

Los rubros que menos cayeron fueron los que tradicionalmente tienen un mejor desempeño en esta etapa del año, es decir, productos de aire libre como pelotas inflables, globos de agua, barrenadores, lanza aguas, andadores, monopatines y artículos de playa.