Que el debate no nos agote
Inversión de Fogwill: se necesitan buenos poetas
La demanda instantánea de las redes, la positividad individualista, han construido la ilusión de la democratización de la palabra y del arte. Sin embargo, no hay democratización lograda si ese acceso no está acompañado de un acceso a la circulación del saber, y en el caso específico del arte, a un saber hacer, a un saber pensarse desde el mismo arte en las condiciones socio-políticas actuales.
























