Los investigadores del homicidio de Sandra Judith Viviano, la docente muerta el sábado último de un tiro en la cabeza durante un intento de robo en la localidad bonaerense de Haedo, intentaban determinar si antes de cometer ese crimen la misma banda asaltó en un raid delictivo a un fiscal en el partido de La Matanza y luego a un comisario en Morón. Fuentes judiciales informaron que el fiscal a cargo de la causa, Fernando Capello, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 de Morón, indagó ayer a los tres sospechosos que quedaron detenidos por el caso y les imputó tres hechos de esa seguidilla de asaltos. Según la principal hipótesis, el viernes pasado el fiscal Eduardo Castelli, de la UFI 1 de La Matanza, fue asaltado cuando regresaba de cenar junto a su mujer y otras dos parejas amigas, en el barrio Don Bosco de la localidad de Ramos Mejía. Luego, los asaltantes se dirigieron a la vecina localidad de Villa Sarmiento, en Morón, donde intentaron robarle a un comisario de la Bonaerense sin éxito. La pista que sigue el fiscal Capello apunta a que después de esos dos hechos, la misma banda cometió el crimen de Viviano, en Directorio al 500 de Haedo, y de allí huyeron unas 20 cuadras hasta la esquina de Emilio Mitre y Chassainge, en Villa Sarmiento, donde le robaron a un joven de 24 años su Volkswagen New Beetle con el que finalmente fueron detenidos en Ciudadela.