"Está escaseando el combustible, aunque YPF diga que sus entregas son normales", advierte nomás al iniciar la entrevista Hugo Bauzá, vicepresidente primero de Fadeeac, federación empresaria de los autotransportistas de cargas a nivel nacional. Las consecuencias también son señaladas de inmediato: los precios y las condiciones de pago, por el combustible que se consigue, ya no son los mismos. "Como compramos en cantidad, pagábamos con un descuento del 10 por ciento sobre el precio del gasoil en surtidor; ahora pagamos con un recargo del 5 por ciento y si no, no tenemos el combustible: con el supuesto congelamiento, el precio del combustible nos subió un 15 por ciento", resume Bauzá, subrayando que esta situación está provocando "un descalabro" en toda la actividad, porque los usuarios del transporte se niegan a pagar un precio del flete más caro cuando el gobierno está informando que el precio de los combustibles está congelado por 90 días. 

Las compras mayoristas de los autotransportistas a los distribuidores de combustibles "es un mercado que no se ve, pero desde hace aproximadamente una semana viene registrando escasez de producto y aumento de precios", indicó el dirigente empresario. Tampoco existe la chance siempre de ir a cargar a una estación de servicio habitual, "por el tiempo que se pierde y porque no te van a vender en cualquier lado: un camión carga en promedio 500 litros, algunos más que eso". Además, tal cual advirtió Fadeeac, "si todos los camiones se vuelcan a cargar en surtidor, las estaciones de servicio colapsarían".

Al ser consultado sobre las regiones en las que la falta de combustible es más marcada, Bauzá responde que, "en el Norte, principalmente". "El faltante más grande se registra em la ruta 34, la llamada ruta del cereal, que atraviesa las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán y Santiago del Estero". Además, señala que en la región del NEA (Formosa, Chaco, Corrientes y Misiones) también hubo faltantes, pero en este caso las refinerías se lo adjudican a "la bajante del Paraná, que impidió que el combustible llegara por barcaza a Puerto Barranqueras, en Chaco (un polo de distribución), y el traslado por camión se hace más lento". 

El dirigente de Faeeac indicó que, pese a que se le hizo llegar el reclamo al ministro de Transporte (Guillermo Dietrich) y al secretario de Energía (Gustavo Lopetegui), todavía no hubo ninguna palabra oficial acerca de si habrá una solución al conflicto. Por el momento, la situación del sector está en situación de descalabro "y cada día empeora un poco más".