En momentos de crisis económica y desigualdades, son las niñas, los niños y los adolescentes quienes más sufren las múltiples dimensiones de la pobreza. Esa es la lectura que hace la defensora provincial de Niñas, Niños y Adolescentes Analía Colombo. En concreto, los pibes y pibas son los más expuestos a riesgos. Y, considera la funcionaria, que los gobiernos priorizan otras agendas por sobre - lo que ella cree que es- "la deuda principal. En diálogo con Rosariol12, Colombo destacó que la situación se agudizó "considerablemente" desde que Mauricio Macri es presidente.
-Ante el escenario de crisis aguda y aumento de la pobreza, ¿cuál es la situación de los niños en Santa Fe?
-El incremento de la pobreza y la desigualdad impacta no solo en forma directa, sino de manera grave en la población de niños, niñas y adolescentes. En este sentido, la Defensoría entendió que era importante adherir al posicionamiento de Unicef Argentina, que habla de que casi la mitad de los chicos y chicas de nuestro país, que son más de 13 millones, viven en situación de pobreza. Adherir en virtud de que impacta la pobreza directamente en los niños, en el acceso a derechos fundamentales, derecho a la salud, a la educación, a alimentarse, a tener una vivienda digna. Lo que vemos es que los gobiernos, por así decirlo, están muy posicionados en las cuestiones económicas y por eso nuestra frase es `la deuda es con la niñez, la infancia`. No importa cuál sea tu endeudamiento, tu posicionamiento económico, tu plataforma, cuando la pobreza impacta sobre el acceso a derechos la deuda es con esta población.
-Habla de "gobiernos", en plural, ¿le adjudica mayor responsabilidad al Ejecutivo que lidera Macri o también a otros?
-Las deudas no se generan en un corto plazo, lo que sí vemos es que en los últimos cuatro, cinco años hubo un aumento considerable por distintas medidas y una brecha que se acrecentó entre la pobreza, la desigualdad y las personas que están por debajo de la línea de pobreza. Digo, la situación económica de la Argentina es histórica, pero en los últimos años se ha agudizado considerablemente.
-¿Cuáles son las particularidades, si es que las hay, de Santa Fe?
-En Santa Fe el impacto es directo, es un reflejo de lo que pasa a nivel nacional. La población de niños, niñas y adolescentes en Argentina es del tercio, en Santa Fe también. Y por ende, la pobreza que impacta a nivel nacional también impacta en la provincia. De hecho, en nuestra pequeña institución, un organismo de control de la ejecución de políticas públicas del Ejecutivo, vemos que hay un aumento considerable de casos de vulneración de derechos fundamentales. Hay un aumento de abuso sexual respecto de niños, niñas y adolescentes en el ámbito intra familiar, un aumento de situaciones que atentan contra la integridad psíquica y física con motivo de las violencias. Y eso va de la mano de la pobreza, la desigualdad, la falta de trabajo, de la falta de vivienda. El tema de la vivienda es algo que se ha profundizado en los últimos tiempos. Para ser claros: el dinero no alcanza, ni para ir al supermercado ni para tener una vivienda. Eso impacta directamente en los pibes.
-¿Cuál es la responsabilidad del gobierno provincial?
-Las responsabilidades son de los gobiernos, en primer lugar del gobierno nacional, porque hay políticas públicas que son nacionales. El tema de la vivienda es de competencia exclusivamente nacional, el tema de no subsidiar o no enviar los fondos que corresponden por coparticipación a las provinciales también es nacional. Eso impacta en todos lados, por supuesto que también en Santa Fe. Con esto no quiero decir que haya debilidades, defectos o cuestiones para mejorar en la provincia, también las hay. Pero esto se trata de políticas públicas económicas nacionales que impactan en las provincias. Nosotros podemos dar cuenta de lo que pasa en Santa Fe, por eso nos referenciamos en el informe de Unicef, que es nacional.
-En la provincia habrá cambio de gobierno y probablemente también en Nación, ¿hay expectativa en cuánto a la renovación de autoridades?
-La expectativa siempre está porque no podemos pensar que las cuestiones van a empeorar. Los cambios de gobierno nos sirven a nosotros, como organismo de control, para volver a repensar estrategias y volver a poner en la agenda pública y política de los nuevos gobernantes a la infancia y la adolescencia.
