El Gobierno nacional, a través de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), comenzó a sancionar ayer con multas que va desde los 3.500 pesos a los 7.000 pesos a todos los vehículos que superen las velocidades permitidas en los accesos Norte y Oeste.

Según un comunicado difundido este domingo por el Ministerio de Transporte de la Nación, se aumentaron los controles de velocidad para reducir los incidentes viales en esos dos accesos y los municipios aledaños a la traza de la Panamericana pusieron a disposición sus radares móviles para incrementar la fiscalización y la prevención.

Según el comunicado, los conductores serán controlados en diferentes puntos con el fin de generar "un cambio de conducta y mayor respeto por las normas de tránsito".

Desde enero a noviembre de 2019, se detectaron 751.937 vehículos que excedieron el límite de velocidad permitido, sin embargo, los conductores no fueron notificados debido a la falta de coordinación entre el gobierno nacional de Macri y el provincial de Vidal.

Ahora, aquellos conductores que excedan la velocidad permitida deberán pagar multas que oscilan entre 3.500 y 7.000 pesos.

Fuentes del Ministerio indicaron que la colocación de radares es la principal herramienta para disminuir los incidentes viales ocasionados por no respetar las velocidades máximas y señalaron que el uso de esta tecnología permite poder ampliar el control en todo el territorio.

De esta manera, explicaron, se pueden "dedicar los recursos humanos a aquellas tareas donde la tecnología no puede resolverlo, como por ejemplo los controles de alcoholemia y estupefacientes" u "orientar al tránsito cuando hay problemas".