El sorteo de la flamante Liga Profesional de Fútbol vino con una noticia que sacudió a las empresas que tenían los derechos de transmisión del torneo de la Primera División del fútbol argentino, porque en la previa al mismo, los dirigentes reunidos en el predio de la AFA decidieron por votación finalizar el contrato con el Grupo Disney, al que acusaron de "graves incumplimientos" contractuales por no informar la fusión entre ESPN y Fox Sports.

Cómo adelantó Página/12 hace unas semanas, la empresa Disney –dueña de ESPN– adquirió el pasado marzo la señal Fox Sports, que durante el Gobierno de Mauricio Macri se había adjudicado el 50 por ciento de los derechos de televisación del fútbol. Sin embargo, esa fusión fue rechazada y declarada nula por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), que en su dicatamen señaló que esta fusión restringiría o distorsionaría la competencia. 

Con ese dictamen en contra, el gigante Disney-Fox -dueño de al menos nueve señales deportivas, además de Fox Sports Premium que transmitía hasta antes de la pandemia los partidos de la Liga Profesional de Fútbol, quedaba obligada a presentar sus argumentos y las consideraciones que considerase oportunas. Sin embargo, la decisión de la dirigencia del fútbol argentino cortó por lo sano y decidió buscar un nuevo comprador para los derechos. En esta dirección, la prioridad recayó sobre la empresa Turner, propietaria del otro 50 por ciento del contrato de la televisación del fútbol argentino. 

La reunión en Ezeize fue liderada por el presidente de la AFA, Claudio "Chiqui" Tapia y una docena de dirigentes que luego presenciaron el sorteo de la fase inicial del flamante torneo de la LPF, entre ellos el presidente de la flamante liga y presidente de San Lorenzo, Marcelo Tinelli, el presidente de Racing, Víctor Blanco, entre otros; otra parte siguió la votación a través del una videollamada. No estuvieron los presidentes de Boca y de River, Jorge Ameal y Rodolfo D'Onofrio, que luego emitieron un comunicado conjunto en el que aseguraron que "no fueron parte de la definición del nuevo escenario contractual".


En una reunión liderada desde el predio de AFA en Ezeiza, que contó con la presencia de una docena de dirigente “in situ” y el resto vía zoom, los clubes votaron a favor de “rescindir de manera irrevocable” el vínculo con una de las dos compañías que desde 2017 tienen los derechos para trasmitir los partidos de la Primera división del fútbol argentino. 

Lo que los dirigentes analizaron antes de votar es que la unión entre Disney y Fox y el cambio de control se hizo sin tener la aprobación de las autoridades argentinas, porque al momento del fusión la firma FSLA Holdings LLC (Fox Sports) no cumplió con informar su fusión con ESPN luego de que esta fuera adquirida por el Grupo Disney. 

Mientras se espera de la decisión final de la Secretaria de Comercio, los dirigentes argentinos tuvieron en consideración el dictamen de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), que entre otras cuestiones señaló: "las señales ESPN y Fox Sports son los competidores más cercanos en el mercado de señales deportivas, la operación de fusión elimina a un competidor relevante. Por consiguiente, la operación tendría como consecuencia el incremento sustancial de la concentración en el mercado de señales deportivas con un aumento significativo en el poder de mercado y de negociación de las empresas notificantes, con el consecuente impacto en los consumidores, que podrían ver incrementado el valor del abono de televisión paga".

Entre los argumentos que escucharon los dirigentes en la previa a la votación, se esgrimió "el dictamen de objeción de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia" y el peligro que la mencionada fusión conlleva con respecto a la "restricción de la competencia" . 

Con el contrato caído, la AFA y la LPF deberán cumplir todos los pasos formales para readjudicar ese 50 por ciento de los derechos a otra companía. Imagen Satelital S.A. (Turner-TNT Sports), partirán como favoritas, justamente por poseer otro 50 por ciento del negocio. Lógicamente, la operación conllevará seguramente a un reajuste en los valores del contrato. Esto no es, precisamente, un tema menor para los clubes, que desde hace un tiempo venían planteando la cuestión de una mejora en los ingresos que reciben de la televisión