I’m Your Woman                                                 6 Puntos

EE.UU., 2020

Dirección y guion: Julia Hart.

Duración: 120 minutos.

Intérpretes: Rachel Brosnahan, Marsha Stephanie Blake, Arinzé Kene, Bill Heck.

Estreno en Amazon Prime Video.

Guionista de sus películas, la realizadora Julia Hart se dio este año un lujo para pocos. Estrenó dos films, con diferencia de nueve meses. I’m Your Woman es el segundo de ellos, cuarto de esta guionista y directora indie. En cuanto a la actriz treintañera Rachel Bosnahan, sus papeles más relevantes fueron el protagónico de la serie The Marvelous Mrs. Maisle, por el que ganó varios premios, y un importante secundario en House of Cards. En I’m Your Woman la muy rubia Bosnahan está excelente, en el rol de una joven esposa sometida por su marido. Esa línea temática y dramática ha sido y es, por supuesto, sumamente transitada por el cine contemporáneo. El modo de representación elegido por la realizadora, de cuño netamente realista, es el que hace la diferencia. Pero al mismo tiempo Hart intenta abordar el cine de género, y allí es donde I’m Your Woman pierde singularidad.

Una tarde como cualquier otra, el muy machote de Eddie (Bill Heck) da una sorpresa a su esposa Jean (Brosnahan), al aparecerse con un bebé en brazos. Como tantas otras veces Eddie se había ido para no volver. Como tantas otras, volvió. Pero ahora con un regalo. Deja la novedad en manos de la abatatada Jean y se va a recibir a sus amigos, cerrándole la puerta en la cara. ¿Se trata de un niño adoptado? Difícil: un solo padre no está en condiciones de hacerlo. ¿Entonces de dónde salió ese niño? “¿Vos sabés que Eddie es ladrón, no?”, le pregunta uno de sus “socios” a Jean. En medio del estupor de Jean, que no sabe ni hacer un huevo frito (literal), mucho menos cuidar a un bebé que vendría a ser su hijo, cae en la casa otro compañero de escapadas de su marido y le dice que tiene que irse ya mismo de allí. Un desconocido la está esperando en la puerta, para llevarla a algún lugar secreto. Las circunstancias llevan a Jean de la nariz. Casi como una hipérbole de lo que, por no poder hacerse cargo de su vida, le pasa en el día a día.

Filmada en una zona anónima pero definitivamente no glamorosa de los Estados Unidos, I’m Your Woman transcurre entre caminos poco transitados, casas de clase media baja, autos que no son últimos modelos y rincones en los que se adivina que alguna vez hubo fábricas. No es difícil percibir que el trabajo un abunda. El único parecería ser el que tienen Eddie y sus amigos. Los personajes oscilan entre los abusadores como Eddie, las abusadas como Jean y Teri --la mujer negra de la que se hará amiga-- así como hombres herméticos como cajas fuertes. I’m Your Woman no carece de algunas oposiciones esquemáticas, como la que se establece entre el matrimonio asimétrico de Jean y Eddie y la familia contenedora que componen Teri, su hijo y su padre, un abuelito tan bueno como el de Heidi. A su turno, la asunción de Jean como madraza, primer paso en su camino de liberación, puede ser cuestionable desde una perspectiva de género. Lo pasa por ese realismo sucio, que Julia Hart acompaña con una falta de urgencia que tal vez sea producto de la desesperanza. Hasta que la esperanza asoma.