Los casi 700 contagios de ayer en Rosario, de los 2012 que hubo en toda la provincia, volvieron a encender las luces rojas en el territorio un día después de las medidas restrictivas que tomó nación para Capital Federal y Amba. Ya la ministra de Salud Sonia Martorano le había dicho a los concejales que la ciudad estaba en “zona roja” y ayer se vio claramente que la caracterización no es exagerada. De todos modos, la titular de la cartera sanitaria ratificó la decisión del gobierno provincial de mantener el actual nivel de actividades, pero pidió “extremar cuidados” porque la segunda ola demuestra ser más agresiva que la primera. Con las 60 mil vacunas que llegarán el lunes a la provincia el cronograma de vacunación contra el Covid seguirá con mayores de 65 a 70 años. Comorbilidades con más riesgo de 50 a 60 años. Discapacidad “cortizada” por riesgo y personal de seguridad con riesgo. Ayer se empezó con trasplantados y pacientes con fibrosis quística. En Santa Fe, hasta el momento se ya se aplicaron 420.216 primeras dosis de las vacunas recibidas  y 58.985 de las segundas dosis.

Tras las nuevas restricciones para el Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba), la ministra de Salud santafesina, Sonia Martorano, ratificó la decisión del gobierno provincial de mantener el actual nivel de actividades, pero pidió “extremar cuidados” porque la segunda ola demuestra ser más agresiva que la primera. “Hay que extremar cuidados, no socializar, no reunirse porque el nivel de contagio es acelerado”, señaló la funcionaria a la prensa en el Galpón 17 de Rosario donde se llevaba adelante un operativo de vacunación especial a pacientes trasplantados y con fibrosis quística.

Consultada sobre las clases presenciales –una de las primeras actividades que el presidente Alberto Fernández suspendió en el Amba–, la ministra confirmó su sostenimiento en Santa Fe pero hizo un pedido especial a los padres o adultos que llevan y traen a los niños. Advirtió que muchas veces son ellos quienes relajan los cuidados y no los más pequeños: “Preocupa más el afuera que el adentro (de las escuelas)”. “La agresividad del virus no es como la primera ola, las tomografías son diferentes, hay mayor densidad de gente joven (contagiada) y eso lleva a una aumento de ocupación de camas. Estamos en un momento de tensión”, dijo. Ayer se vacunó a un grupo de 50 pacientes trasplantados y con fibrosis quística en el Galpón 17 y la ministra estuvo presente, y visiblemente emocionada. 

Santa Fe registró este jueves 1950 nuevos casos de coronavirus, de los cuales 698 pertenecen a Rosario. En este marco, cabe destacar que la cifra de casos en la ciudad se ubica por encima de la del día anterior, cuando se reportaron 616 infectados. En tanto la segunda localidad con más cantidad de contagios es la capital provincial, que en las últimas horas registró otros 139 nuevos casos. Asimismo, Santa Fe sumó este jueves 15 nuevos fallecimientos una causa del Covid-19, de los cuales seis son de Rosario, dos de Rafaela, dos de Santa Fe y dos de Villa Cañas. San Guillermo, Villa Mugueta y Piñero sumaron una muerte. En total, la provincia registra 4.302 decesos por coronavirus desde el inicio de la pandemia.

 

En Santa Fe hay actualmente 245 personas internadas en Sala General y 152 en Unidad de Terapia Intensiva. Asimismo, ya se aplicaron 420.216 primeras dosis de las vacunas recibidas (Sputnik V, Covishield y Sinopharm) y 58.985 de las segundas dosis.

Por su parte, el gobernador Omar Perotti reiteró que decidió tomar en cuenta la sugerencia del presidente Alberto Fernández quien pidió a las administraciones provinciales que lo acompañen con eventuales nuevas medidas, aunque quedó confirmado que por el momento no habrá más reducciones de actividades. No obstante, en el gobierno provincial ratificaron que están preparados para actuar “de la manera más rápida posible”, y se continuará monitoreando tres ítems: cantidad de camas críticas ocupadas, tasa de contagio y mortalidad.

En tanto, los ministerios de Producción y Trabajo de Santa Fe actualizarán protocolos sanitarios y se redoblarán esfuerzos para una mayor coordinación con el sistema privado de salud. Además, se fortalecerán los controles de ingresos a la provincia y aumentará el número de testeos. Además, la Casa Gris dio a conocer que todas las medidas que puedan tomarse se harán en conjunto con intendentes, presidentes comunales y organizaciones de la sociedad civil.

Los funcionarios santafesinos miran con lupa el avance de la curva de contagios y la saturación de camas para definir si en la provincia se tomarán medidas más restrictivas, aunque por el momento todo seguirá sin novedades a pesar de que Fernández anunció que en el Area Metropolitana de Buenos Aires (Amba) todo cerrará a partir de las 20. "Monitoreamos todos los datos en todo momento", ratificó Perotti que multilica las reuniones con el comité de expertos que asesora a su gobierno.