Luego de que este jueves quedara firme el fallo que lo sentenció a cuatro años de prisión efectiva, ayer fue detenido el gasista Carlos Osvaldo García, único condenado por la explosión ocurrida en Salta 2141, en la que murieron 22 personas, en 2013. Así lo dispuso la jueza de Ejecución Penal, Luciana Prunotto. Su defensa ya presentó un pedido de audiencia para solicitar que cumpla la condena en prisión domiciliaria, ya que tiene más de 70 años y problemas de salud. 

Después de un extenso juicio oral y público que también sentó en el banquillo a gerentes y empleados de Litoral Gas y responsables del consorcio de administración del edificio, García fue el único condenado por el delito de estrago culposo agravado, en 2019, ya que trabajaba en el lugar del hecho la mañana del 6 de agosto de 2013 para cambiar el regulador de gas, cuando se produjo el desacople y la fuga masiva.

En marzo del año pasado, el tribunal de la Cámara Penal conformado por Carina Lurati, José Luis Mascali y Carlos Carbone confirmó esa decisión y este jueves el fallo quedó firme ante el rechazo de un recurso de inconstitucionalidad, según confirmó la defensa a cargo de Hugo Buffarini.

En tanto, como García tiene 70 años y problemas de salud, su abogado solicitó una audiencia en la Oficina de Gestión Judicial para pedirle a la jueza de Ejecución que cumpla lo que queda de la pena bajo arresto domiciliario, por lo que esperan fecha para los próximos días.

La resolución del juicio y la apelación no dejaron conformes a las familias de las víctimas que apuntaban a penas para todos los imputados, ya que en su momento el tribunal compuesto por Marcela Canavesio, Rodolfo Zvala y Carlos Leiva consideró que no hubo elementos suficientes para responsabilizar penalmente a los reclamistas de la empresa Litoral Gas que hicieron trabajos en el edificio previamente, ni a sus superiores, ni a los encargados de la administración, por lo que fueron absueltos.