Bajo la consigna "Bocinazo por la Vida", un grupo de docentes, padres y estudiantes de la Ciudad de Buenos Aires se reunieron frente a la Jefatura de Gobierno porteña para protestar por la decisión de continuar con la presencialidad escolar, ignorando el Decreto de Necesidad y Urgencia del Gobierno Nacional.

"Todos estamos a favor de la presencialidad, pero queremos que sea realmente en condiciones básicas para todas y todos los niños, más en una escuela pública", declaró una de las participantes de la protesta, en medio de una oleada de bocinazos que se sumaban a la marcha.

Una de las docentes de la movilización remarcó que el Gobierno de la Ciudad declaró que aquel personal que se negara a trabajar sería sancionado. "Nuestras familias no son datos, no son números", agregó la profesora. Mientras tanto, el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, había ratificado la necesidad de aclarar el problema de la presencialidad y se negó a aplicar sanciones en aquel personal que optara por seguir el DNU.

"No puede ser que estemos obligados a venir a laburar, a exponer nuestra vida. Estamos obligados a venir a laburar porque si no venimos nos sancionan", agregó la docente. La marcha que se dio entre barbijos, distanciamiento social y al aire libre.