“El fiscal (Juan Pablo) Tahtagian violó todas las normativas y todos los derechos, ocultó, mintió, encerró a los testigos en un calabozo y debe ser juzgado”. Marina Mapelli es tía de Lucas Verón, un chico que fue fusilado por dos policías bonaerenses el 10 de julio de 2020 en González Catán. Se abrieron tres causas: en la principal están presos los autores materiales del homicidio, en la segunda son investigados los mandos superiores por encubrimiento y la tercera, la que involucra al fiscal Tahtagian, fue archivada. Familiares y organizaciones sociales y de DD.HH. reclamaron que se reabra, por la gravedad institucional que implica.

Los familiares se reunieron con el fiscal general del Departamento Judicial de San Martín, Marcelo Lapargo, para solicitarle “que desarchive la causa contra Tahtagian y le dé tratamiento porque tenemos todas las pruebas de la connivencia con la comisaría segunda de González Catán”, para distorsionar los hechos y lograr --sin éxito en este caso-- la impunidad de los policías que dispararon sin ningún motivo contra Lucas Verón, justo el día de su cumpleaños número 18.

En declaraciones a Página/12, Marina Mapelli recordó que el asesinato ocurrió en la calle, a pocas cuadras de la casa donde Lucas vivía con su familia, cuando junto con un amigo de 17 años habían ido en moto a un comercio cercano a comprar una gaseosa.

Los imputados por el crimen son los policías Ezequiel Benítez y Cintia Duarte, a quienes se les dictó la prisión preventiva por “homicidio agravado por ser cometido por un miembro de una fuerza de seguridad y por el uso de arma de fuego”, más la “tentativa de homicidio”, en el caso del menor de edad que conducía la moto.

Mapelli señaló que los policías de la Bonaerense “lo hicieron meter al chico de 17 años y al padrino del menor en un calabozo, al adolescente le hicieron firmar una declaración falsa obligándolo a decir que con mi sobrino habían salido a robar y hasta lo amenazaron con condenarlo a 25 años de prisión si se negaba a firmar”. La tía de Lucas precisó que habían trucado una serie de datos, al punto de intentar modificar las imágenes de las cámaras de seguridad, todo esto “en connivencia con el fiscal Tahtagian”.

En una nota anterior, este diario dialogó con Roberto Cipriano, secretario de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), organismo que se presentó como particular damnificado en representación de la familia de Lucas. En una reunión con la fiscal general de La Matanza, Patricia Ochoa, denunció la “connivencia del fiscal Tahtagian con la actuación ilegal de la Policía Bonaerense para intentar desvirtuar los hechos en los momentos posteriores” al homicidio.

“Al chico de 17 años que iba con Lucas lo llevaron a la comisaría, lo pusieron en un calabozo, a él y a su padrino, hasta que firmaron el acta” con la falsa versión. Eso ocurrió “cuando el fiscal estaba en la comisaría, que es muy pequeña, de manera que no puede haber ignorado lo que estaba pasando”, recalcó Cipriano.

Sobre el caso, sostuvo que “es increíble lo que pasó, porque a Lucas lo fusilaron cuando estaba a una cuadra de su casa”. Hubo “dos o tres disparos”, según los testigos, y uno de ellos le dio en el pecho, de frente, al joven asesinado. Los policías se fugaron y no denunciaron lo ocurrido ante las autoridades de la comisaría del barrio de Villa Scazo, en la localidad de González Catán.

La tía de Lucas explicó que además de la causa principal por el homicidio y la denuncia contra el fiscal, en el otro expediente “se investiga lo que llamamos la cadena de mandos o complicidad, con un montón de involucrados”.

Los que están siendo investigados por ahora en esa causa son el comisario y segundo jefe Departamental de la Matanza Diego Ocampos; el segundo jefe de la Departamental subcomisario Daniel Quinteros y la oficial subayudante María Giselle Genez. Ellos fueron señalados por haber inventado” un robo inexistente y por haber intentado distorsionar las imágenes de las cámaras de seguridad que tomaron el momento de la ejecución de Lucas. Los tres fueron indagados en noviembre del año pasado.

En la reunión con el fiscal Marcelo Lapargo para pedir la reapertura de la causa contra Tahtagian estuvieron presentes los padres de Lucas, Roberto Cipriano de la CPM, Alejo Rivera por H.I.J.O.S. La Matanza, Héctor Sposato, secretario general de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) de La Matanza, la tía de la víctima, que además es referente zonal del Suteba, y representantes de la Comisión por la Memoria, Verdad y Justicia Zona Norte.