La Justicia penal le denegó la libertad a uno de los conductores que protagonizó la picada fatal del 20 de marzo pasado en Avenida del Rosario y Ayacucho, donde murieron David Pizorno y su hijo de ocho años, Valentino. La resolución del juez Facundo Becerra llegó luego de que la semana pasada se confirmara también la prisión preventiva del hombre que iba al volante del otro vehículo involucrado en el siniestro. Ambos seguirán tras las rejas. Pablo Mancini y Germán Schoeller están imputados por el delito de homicidio simple con dolo eventual. La acusación de los fiscales, Valeria Piazza Iglesias y Walter Jurado, les atribuye haber conducido a unos 132 kilómetros por hora en una intersección transitada por peatones, no frenando en ningún momento al cruzar calle Ayacucho y haciendo caso omiso a la intermitencia del semáforo. A Mancini se le imputa que "roza" el auto de las víctimas "haciendo que éste realice un giro. Así conjuntamente con Schoeller, provocan el fallecimiento de las víctimas y las lesiones graves por politraumatismos" de la madre del niño.