La mujer que sufrió un ataque sexual en la localidad de Londres, en el departamento Belén, está analizando la posibilidad de irse de ese lugar luego de que el juez Miguel Ángel Aybar dejara en libertad a sus tres agresores. 

Así lo informó una sobrina suya, Nazarena Palavecino, quien relató que la mujer está acompañada por una hermana. "Está muy mal. "Nos costó entender a todos y sé que ella se puso a llorar y manifestó el terror que sentía de saberlos libres", añadió. Contó que a raíz de esa decisión de la Justicia catamarqueña, en la familia están ahora tratando que la joven "vaya a vivir a la ciudad Capital hasta que se pueda resolver esta cuestión", porque además recibió amenazas en las redes sociales, igual que recibió amenazas también la mujer que la ayudó. "Sé que la testigo a la que le pusieron custodia por las amenazas que recibió también está aterrada. Ellos ya transitan las calles de Londres”, dijo Palavecino.

Luego de que el juez subrogante Miguel Ángel Aybar liberó al policía, su hijo y el sobrino acusados de abusar sexualmente en patota a una docente de Londres, en el departamento Belén, familiares de la sobreviviente, aseguraron que temen por su salud física y mental. Por su parte, la abogada de la víctima, Silvia Barrientos, aseguró que la decisión del magistrado significa “un retroceso para la Justicia de Catamarca en materia de derechos humanos y de género”. Además, señaló contradicciones en esa resolución judicial y adelantó que apelará. 

Aybar decidió el martes último hacer lugar al pedido de la defensa del empleado municipal Rodrigo Hernán Ruiz (24), el sargento de policía Edgardo de la Cruz Roldán (46) y al hijo de éste, Cristian Roldán (23), un becado de la comuna de Londres, y dejarlos en libertad pese a la grave acusación que pesa sobre ellos. Para su libertad fijó una caución personal (no real) de 100 mil pesos para cada uno, “fianza que consistirá en la obligación que asumirán los imputados juntamente con dos fiadores solidarios de reconocida solvencia económica”.

La decisión generó malestar tanto en los familiares como en habitantes del pueblo, quienes vieron caminando por las calles a los acusados en horas del mediodía.

Palavecino explicó que por decisión de la psicóloga y la psiquiatra que atienden a la víctima desde el día del abuso, “ella está incomunicada. No le permiten ver redes sociales porque ya la amenazaron por esa vía (...). Nosotros tratamos de hacerle saber que estamos con ella y mucha gente la acompaña. Su rutina hoy es ir a la psicóloga o a la psiquiatra, nunca más pudo salir sola a caminar como le encantaba hacer”, contó.

En este contexto, mencionó que desde el municipio de Londres “se le dio la espalda. Ellos tienen una radio y nunca pudimos anunciar marchas o hablar del caso para que la sociedad comprenda qué sucedió”.

Por su parte, la abogada de la docente habló con Catamarca/12 sobre los argumentos vertidos por el juez Aybar para dejar en libertad a los acusados. “Este fallo va a trascender como ejemplo de lo que no se tiene que hacer. Este fallo fue un yerro. El juez ha puesto por encima del testimonio coherente, creíble y doloroso de la víctima, más otras pruebas que obran en la causa, a los acusados. Ya no como abogada, sino como mujer estoy indignada, porque esto nos afecta a todas. Porque significa un retroceso en la justicia de Catamarca. Un paso muy para atrás que se da, que ha dado este juez civil. Se ha olvidado que los jueces están obligados a fallar con la perspectiva de género”, opinó.

Asimismo, aseguró que el fallo “es completamente contradictorio. Por un lado observa que la víctima es vulnerable y por otro la deja a la buena de Dios a que la manada de lobos hambrientos la agarren”.

Qué dice el juez

Catamarca/12 tuvo acceso a los fundamentos por los cuales Aybar dejó en libertad a los acusados, en el que sostiene que aún faltan pruebas en la investigación y afirma que en estas condiciones no puede mantener las prisiones preventivas sin violar las garantías constitucionales del debido proceso. 

En el pronunciamiento, el magistrado menciona todas las pruebas que se incorporaron en la causa, entre ellas el examen ginecológico practicado a la denunciante, las pericias psicológicas y psiquiátricas de la víctima, y también las declaraciones de los acusados y testigos. Si bien la sobreviviente dio una declaración de casi tres horas, la resolución de Aybar nada dice al respecto.

El juez recuerda que el artículo 292 del Código Procesal Penal de Catamarca "exige para la procedencia de la detención preventiva, que se den en el caso" dos supuestos en forma conjunta: "no solo la existencia de elementos de convicción suficientes para estimar que los hechos han existido y que los imputados han participado en los mismos en forma culpable, sino también 'la llamada peligrosidad procesal', que se traduce en la inminente y evidente inconveniencia que la libertad de los inculpados pueden acarrear en relación a los fines del proceso”. 

Y si bien en este caso en particular, entiende que “surge palmaria la situación de vulnerabilidad que atraviesa la presunta víctima, y es así que se solicita la intervención del Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia de Catamarca, pero en virtud de la garantía del Debido Proceso, en este estado de la investigación la fiscal no cuenta con los elementos de convicción suficiente para solicitar la Prisión Preventiva”. 

El juez también destaca que “es necesario reconocer la aflicción y el estado psicológico de la presunta víctima de los hechos endilgados, fundamento del pedido del Ministerio Público Fiscal de esta requisitoria", pero añade que “En la etapa procesal que hoy nos ocupa, se deben analizar estrictamente lo referente a las garantías procesales y constitucionales que le asisten a los imputados, sobre todo en la resolución de una medida de coerción personal”. Este es precisamente el argumento de la defensa de los acusados, a cargo del abogado Luciano Rojas.

En cuanto a los derechos de la víctima, luego de citar convenciones como la de Belem Do Pará y la CEDAW, el juez dice que “a los fines de materializar esta protección la intervención de los organismos estatales administrativos creados por la Ley 5.434 de Violencia familiar y de género de la Provincia de Catamarca ya que su objetivo principal es la aplicación irrestricta de la Ley Nacional 26.485", en este caso el Ministerio Público Fiscal debe "arbitrar la intervención del equipo interdisciplinario dispuesto por el Art 10 de dicha ley ante el Ministerio de Desarrollo Social del Gobierno de la Provincia de Catamarca”.

En este caso, el artículo mencionado por el magistrado propone la creación de un equipo interdisciplinario de atención en crisis a las víctimas de violencia familiar y de género. Sin embargo, este equipo no trabaja en Belén, sino en la ciudad capital. En Belén existe un área específica dentro de la comuna, y la víctima, igualmente cuenta con recursos y asiste desde el momento del hecho a psicólogos y psiquiatras que la contienen.

Además, señala que como juez no está habilitado para “imaginar libremente la prueba que no logra conseguir”. Y concluye: "Tenemos una causa en la que todavía no se ha agotado la Investigación Penal Preparatoria, que es necesario ampliar las medidas probatorias, a efectos de que analizadas en forma conjunta permitan alcanzar un grado de certeza que hasta el momento el Ministerio Público Fiscal no ha alcanzado, sobre todo teniendo en cuenta el tipo penal que se le endilga a los encartados, hechos sumamente graves y repudiables, lo que impiden a este Magistrado (mantener la prisión preventiva) ya que se deben respetar sus garantías constitucionales”.

Sobre este párrafo, Barrientos recordó que en las causas por abuso sexual, en las que se investigan hechos de instancia privada, "lo que cuentan son las pericias psicológicas y ginecológicas de la víctima. El juez en esta causa no sólo tiene estos elementos, sino además las declaraciones sin preguntas a tres sujetos a los que sí les cree, pero no dijeron nada y cuyas pericias hablan de que son manipuladores y narcisistas. Además, tiene testigos y otros policías imputados por encubrimiento. Es decir que no comprendo cuántas pruebas más busca”.