La Cámara baja de los Estados Unidos aprobó el proyecto de enmienda de “Obamacare”. Así, se da rienda suelta a “Trumpcare”, aunque el trámite parlamentario no fue tan sencillo: veinte legisladores republicanos votaron en contra y, de esta forma, la ley se aprobó por cuatro votos de diferencia.

Sobre 237 republicanos en la Cámara de Representantes, 217 aprobaron la iniciativa de la Casa Blanca. Los otros veinte se plegaron a la negativa de los 193 demócratas. Así, la votación terminó 217 a 213.

De esta manera, si bien falta que la enmienda pase por el Senado, unos 20 millones de personas podrían perder cobertura médica. Además, se quitan los subsidios para adquirir seguros médicos. Ahora habrá créditos fiscales reembolsables, que luego podrán usarse para pagar la cobertura de prepagas privadas. Por si fuera poco, se elimina la carga impositiva a las aseguradoras y los laboratorios.

Con todo, el costo político para los conservadores puede ser altísimo, algo de lo que tomaron debida nota los veinte legisladores republicanos que votaron en contra. Los representantes de distritos no tan marcadamente conservadores podrían perder sus bancas en las legislativas de noviembre de 2018. Son zonas en las que el plan sanitario de Obama no era mal visto.

Paul Ryan, titular de la Cámara baja, y candidato a vicepresidente en 2012, se erigió como el hombre capaz de conseguir los votos, en medio de una alianza no del todo sólida con Trump, a quien criticó en campaña. También asoma como victorioso el Freedom Caucus, el grupo republicano que mayor cantidad de representantes agrupa. De simpatías con el Tea Party, la rama más derechista del Partido Republicano, representa a los sectores más conservadores en el Congreso y aportó unos treinta votos en la sesión que desmontó Obamacare.