Frente al edificio del Concejo Deliberante de la municipalidad de San Fernando del Valle de Catamarca diferentes asociaciones y autoconvocados, se manifestaron pidiendo justicia para Soledad Ledesma, que en marzo del año pasado denunció por abuso sexual agravado a Daniel Zelaya, concejal y actual presidente del CD.

“La condena social es un enorme resarcimiento, eso logré gracias a todos los que hoy miran a este sujeto con asco, los que cambian de vereda o los que se arriman a él y por sus espaldas murmuran que es un violador. Mientras él viva y ande como si nada, no va a haber uno que lo mire y que haya olvidado mi relato. Seguimos en la lucha, los recursos judiciales no se agotaron y vamos a seguir hasta la Corte Suprema de Justicia. Aunque eso no me devuelva lo que ya perdí”, dijo Soledad luego de la marcha de repudio que fue convocada para ayer miércoles.

Zelaya, que solicitó licencia de su cargo luego de que trascendiera públicamente la denuncia que pesa sobre él, fue elegido como concejal por la capital de Catamarca durante los últimos comicios y aún le restan dos años de mandato.

La causa por abuso sexual fue abierta en marzo del año pasado, cuando Soledad relató en el Juzgado de la ciudad de Concepción, en Tucumán, que había sido ultrajada por él cuando era una niña. Sin embargo, la denuncia fue desestimada por los jueces tucumanos, quienes señalaron que por la cantidad de años que pasaron (más de 20), estaría prescripta.

En junio de este año, la mujer, junto a su abogado, Gustavo Carrizo, apeló la decisión de los magistrados, pero durante la audiencia volvieron a rechazar su pedido de investigar y juzgar lo sucedido. Por esta razón, la víctima volvió a recusar y presentó un recurso extraordinario para lograr justicia en su caso.

Teniendo en cuenta que su padre está enfermo, la mujer no pudo viajar hasta Catamarca a participar de la marcha que había sido convocada por asociaciones feministas en pedido de justicia para ella.

En diálogo con Catamarca/12, Ruth, una de las jóvenes que participó de la protesta, explicó: “Nos movilizamos pidiendo juicio y castigo para Zelaya. Queremos dejar en claro que la inocencia o no de él la tienen que demostrar en el juicio, no por un trámite administrativo. Tucumán garantizó hasta el momento que este abusador ande como si nada y diciendo las barbaridades que anda diciendo. Se está garantizando la impunidad para este sujeto”.

Soledad se manifestó por su parte a través de un comunicado en el cual expresó: “Daniel Zelaya, haciendo uso de la impunidad que goza, vuelve a sus andanzas como presidente del Concejo Deliberante de la ciudad de Catamarca. Frente a la denuncia que enfrenta por abusos sexuales a una niña, es protegido de manera vergonzante por el ministerio público fiscal de Tucumán y los jueces de la cámara de apelaciones, quienes argumentaron una supuesta prescripción de la acción penal”.

El archivo de la causa es una maniobra de impunidad ya que la gravedad de los abusos, que se repitieron durante dos años y llegaron al acceso carnal, son causales suficientes para la justicia investigue y lleve a juicio a Zelaya. Se desestimó mi testimonio para protegerlo, generando un grave precedente contra las víctimas de abusos sexuales durante la infancia. Muchas deben superar el miedo y la dependencia, porque en la mayoría de los casos los abusadores son del propio entorno familiar”, aclaró la mujer.

Zelaya miente al decir que es inocente ya que el archivo de la denuncia fue apelado en la Corte Justicia de Tucumán y si es necesario se recurrirá a instancias superiores, concluyó.