Un museo abierto a todos los públicos y a todas las disciplinas, eso es lo que propondrá el arquitecto y artista plástico Raúl D'Amelio (Rosario, 1957) cuando asuma el 1º de junio de este año la dirección del Castagnino+Macro, la institución en dos sedes que abarca el Museo Municipal de Bellas Artes "Juan B. Castagnino" (Oroño y Pellegrini) y el Museo de Arte Contemporáneo de Rosario (Macro, Oroño y el río). "Por ahora sólo puedo hablar de los lineamientos generales de una gestión futura", anticipó el todavía actual director (hasta fin de mes) del Museo Histórico Provincial y ex director del Museo de la Ciudad (entre 2004 y 2012).

Al Museo de la Ciudad, con la colaboración decisiva de un valioso equipo de gente, D'Amelio lo abrió a disciplinas tan diversas como la música de Coki Debernardi y la Dj Ana Helder, o la poesía de Fabricio Simeoni. Con el Histórico fue aún más lejos y renovó la estética del Museo, adecuando las salas al lucimiento de las colecciones de arte colonial y creando nuevos recorridos más atractivos, como el dedicado a la creación de la bandera nacional.

"Di y recibí. Aprendí muchísimo de los compañeros, aprendí muchísimo de la gestión de esos dos museos. Quiero ser agradecido, porque fueron dos etapas de mucho crecimiento. A partir de todo lo que yo aprendí, les dejé una nueva estética, o al menos eso es lo que traté de hacer. Tanto en el de la Ciudad como en el Histórico, la renovación se nota: la estética, la puesta, las exposiciones, los edificios... las dos instituciones cambiaron su estética. Eso es algo que yo me propuse siempre", contó D'Amelio a Rosario/12.

Egresado como arquitecto de la UNR, donde cursó también Bellas Artes, un factor de peso en el concurso de oposición y antecedentes que ganó este año ha sido sin duda su formación en Brasil y en España. "En Belo Horizonte me formé con la gente del Centro Internacional de Estudios para la Conservación y la Restauración de los Bienes Culturales, un desprendimiento de la Unesco que tiene sede en Roma y se dedica a la conservación de bienes culturales en el mundo entero. Fue mi primera formación internacional, en 2001. Después fui becado por la Fundación Antorchas para estudiar diseño de exposiciones, becado por el Ministerio de Cultura de España en la Subdirección de Museos, en Madrid. En mis últimas capacitaciones, fui becado por el Ministerio de Innovación y Cultura de la Provincia de Santa Fe para tomar cursos en Buenos Aires con la Fundación TyPA (Teoría y Práctica de las Artes). Hay un debate sobre una renovación de los museos, de cómo los museos actúan sobre sus públicos; quien impulsó esto en Argentina es la Fundación TyPA. No estoy alineado completamente con ellos, pero creo que el trabajo sobre los públicos es fundamental. Un eje fuerte del trabajo que quiero desarrollar en mi gestión va a estar puesto en la educación, en la captación de nuevos públicos, en la apertura a los diversos públicos, en la participación. Los visitantes del museo tienen que tomar un perfil más activo; quiero escuchar qué tienen para decir, qué muestras quisieran ver", anticipó.

"Hay algunas ideas generales sobre la definición de espacios, ideas que estoy estudiando actualmente: tanto la sede Castagnino como la sede Macro van a tener conceptualmente definiciones, van a trabajar como espacios vinculados pero con sus propios conceptos. En el Castagnino, el eje va a estar puesto en la colección histórica, y en el Macro, más sobre lo contemporáneo. En ambos habrá aperturas a nuevas propuestas de profesionales que aporten proyectos innovadores; la idea en el Macro es abrirlo a otras disciplinas contemporáneas, no sólo a las artes plásticas sino al diseño, la cocina, la moda, la música, la poesía o el cine. Y también que se abra en lo físico, a través del uso del espacio público", enumeró D'Amelio como preámbulo a un importantísimo anuncio: "El jueves a las 17 en el Castagnino se presenta un proyecto de ampliación del Museo, el proyecto ganador del concurso de arquitectura. Este va ser uno de los ejes más importantes del trabajo de la gestión", anticipó. "Poder lograr el edificio. Con fondos municipales, provinciales, de la Fundación Castagnino o del gobierno nacional, ya se verá; hay que gestionarlo", arriesgó.

Raúl D'Amelio, como artista, fue premiado en el Salón Nacional del 2000 y tiene obras en la colección de arte contemporáneo del Museo que dirigirá desde el mes próximo. Su mentor artístico fue Pablo Suárez, a quien recuerda con gratitud.