El escritor de derecha, militante antivacunas y gurú bolsonarista Olavo de Carvalho murió este lunes en Estados Unidos a los 74 años por causas que aún no fueron reveladas. Según un mensaje de su familia publicado en redes sociales, De Carvalho había sido diagnosticado con coronavirus ocho días antes de su fallecimiento.

El presidente Jair Bolsonaro no tardó en despedir al escritor. “Nos deja uno de los mayores pensadores de la historia de nuestro país”, escribió en Twitter.

“Olavo fue un gigante en la lucha por la libertad y un faro para millones de brasileños. Su ejemplo y sus enseñanzas nos marcarán para siempre. Que Dios lo reciba en su bondad y misericordia”, agregó el mandatario.

No hay información oficial sobre si de Carvalho estaba vacunado contra el coronavirus, pero en varias oportunidades minimizó la gravedad de la pandemia.

“El miedo a un supuesto virus mortal no es más que una historia de terror para acobardar a la población y hacer que acepten la esclavitud como un regalo de Papá Noel”, escribió en mayo de 2020 en redes sociales

Durante la pandemia el pensador de derecha hizo reiteradas críticas a las restricciones sanitarias impuestas por otros países y cuestionó las cifras de muertes ocasionadas por el coronavirus.

Un "filósofo" de la extrema derecha

De Carvalho, oriundo de la localidad paulista de Campinas, se hizo conocido por publicar videos y libros que apoyan el conservadurismo político. Autoproclamado filósofo -ya que no tiene antecedentes académicos-, se convirtió en columnista en la década del ‘80 y escribió para los periódicos Folha de S.Paulo y O Globo

Después de mudarse a Estados Unidos, llegó a una gran audiencia a través de cursos en línea y ventas de libros con una fuerte retórica conservadora -era un férreo defensor del derecho a portar armas- y anticomunista. En 2007 abrió su canal de YouTube donde sumó más de un millón de suscriptores y más de 68 millones de visitas.

De Carvalho ha apoyado en reiteradas ocasiones a Bolsonaro y uno de sus principales admiradores es Eduardo Bolsonaro, diputado federal e hijo del presidente.

Además, varios de sus discípulos han integrado el gabinete: Carlos Nadalim, quien está al frente de Alfabetización del Ministerio de Educación; el asesor especial para Asuntos Internacionales de la presidencia, Filipe Martins y los exministros Ernesto Araújo, de Relaciones Exteriores y Abraham Weintraub, de Educación.

El escritor hizo críticas ocasionales a Bolsonaro, pero hizo la vista gorda a las acusaciones de corrupción contra él. “Puedes llamarlo burro, mal administrador, pero ladrón no puedes hacerlo”, manifestó de Carvalho en mayo de 2020.