Brasil se estremeció esta semana ante nuevos casos de violencia policial, tras denuncias de "tortura" en cuerpos hallados luego de una operación de los uniformados esta semana y el caso de un hombre murió asfixiado dentro de un maletero de un coche policial.

"Vimos un cadáver que tenía la cara cubierta con un polvo blanco, que parecía cocaína", describió este jueves  Rodrigo Mondego, jefe de la comisión de derechos humanos del Colegio de Abogados de Brasil (OAB) en Rio.

Se trata de uno de los cuerpos encontrados después de la operación policial que mató a más de 20 personas el martes en una favela de Rio de Janeiro, que además de evidenciar "tortura" mostraban signos de "ejecuciones sumarias".

Cocaína en la cara

"Los que mataron a esta persona le esparcieron cocaína en la cara y posiblemente le obligaron a comerla. Esto es un acto de tortura", dijo Mondego, quien también dio cuenta de testimonios sobre personas asesinadas con armas blancas.

Según el último informe de las autoridades sanitarias que llevaron un registro de los cadáveres, 26 personas murieron durante el allanamiento policial del martes en Vila Cruzeiro, una favela del norte de Rio, incluyendo una mujer que falleció víctima de una bala perdida.

Pero la policía de Rio, que dice haber sido recibida con intensos disparos en Vila Cruzeiro, revisó el número de muertos a 23 el jueves, indicando que tres cuerpos procedían de otra favela a cinco kilómetros de distancia, donde se alegan enfrentamientos entre narcotraficantes.

"También sospechamos de un gran número de ejecuciones sumarias. Los testigos nos dijeron que hombres que se habían entregado a la policía habían sido fusilados en el bosque", en la parte alta de la favela, según Rodrigo Mondego.

Según él, el propio informe del operativo policial refuerza estas sospechas de ejecuciones extrajudiciales: "Si consultamos las estadísticas de todo el mundo, nunca veremos un tiroteo donde mueran más de 20 personas de un lado y ninguna del otro".

Asesinato en un maletero

En tanto, un hombre murió asfixiado el miércoles en Umbauba, una pequeña localidad de 25.000 habitantes en el estado de Sergipe (nordeste), tras ser colocado en el maletero de un vehículo policial del que salía una espesa humareda.

La Policía Federal de Carreteras (PRF) aseguró en un comunicado que los agentes "emplearon técnicas de inmovilización e instrumentos de bajo potencial ofensivo" ante la "agresividad" de Genivaldo de Jesús Santos, de 38 años, durante un control de carretera.

En un video de un testigo se muestra claramente a dos oficiales de la PRF, con casco, intentando encerrar en el maletero de un automóvil a un hombre, cuyas piernas sobresalen. Del maletero sale un espeso humo blanco, que parece salido de una bomba lacrimógena. El hombre mueve las piernas durante aproximadamente un minuto y luego se queda inmóvil. Luego, los oficiales doblan sus piernas y cierran el maletero.

Consternación

El suceso conmocionó a Brasil y generó el rechazo de la organización de derechos humanos Human Rights Watch, que expresó su "consternación" en un comunicado. Brasil tiene una de las policías que más mata y muere en el mundo: en 2021 hubo más de 6.100 víctimas fatales en operaciones policiales y 183 agentes fueron asesinados, según el proyecto Monitor de la Violencia.

Llamada "masacre" por muchos funcionarios electos y activistas comunitarios, la redada policial del martes resultó ser la segunda más letal de la historia de Rio en una favela. El triste récord data de hace un año, con 28 muertos, incluido un policía, durante una incursión policial en la favela de Jacarezinho.